La Administración de Claudia Sheinbaum en la CDMX anunció obras públicas y privadas por 76 mil millones de pesos sin cumplir con los criterios de participación ciudadana de la Ley de Planeación.
El plan de obras, que incluye 48 desarrollos mayores a 10 mil metros cuadrados, pretende la reactivación económica en la Ciudad tras la pandemia, pero sin el marco legal de planeación.
El pasado 11 de diciembre, el Congreso de la Ciudad de México aprobó la nueva Ley de Planeación sustentada en un enfoque de derechos, desarrollo sustentable, participación y gobierno abierto.
La Constitución local y la misma Ley preveían la creación de un Instituto de Planeación, consultas para un Plan General de Desarrollo y una Ley de Ordenamiento a elaborarse en el primer semestre de 2020.
Los instrumentos constitucionales debían estar terminados entre abril de 2019 y enero de 2020, pero el Congreso capitalino, con mayoría de Morena, no cumplió.
Y aunque hicieron reformas a la Constitución para darse más tiempo, nuevamente se atrasaron y sólo falta por vencerse, en octubre, el plazo para el Plan General.
Ante ese freno legislativo, las obras se han impulsado como en gestiones anteriores.
«Sheinbaum tuvo que congraciarse con el cártel inmobiliario», aseveró el diputado del PAN, Federico Döring, presidente de la Comisión de Planeación
La directora de Ruta Cívica, Mónica Tapia, recordó que los diputados pasaron meses sin avanzar y que para estas fechas, según los plazos originales, ya debían haber definido la planeación para las próximas décadas.
El plan incluye también 480 proyectos de menor tamaño y 53 desarrollos de vivienda popular.