México pidió este miércoles a las autoridades estadounidenses aclarar los presuntos abusos que sufrieron mujeres detenidas en cárceles para migrantes, incluyendo histerectomías forzadas y violaciones.
Consulados mexicanos en Estados Unidos analizan presuntas violaciones de derechos humanos en los centros del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en Atlanta, Georgia, y El Paso, Texas, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
El pronunciamiento de la Cancillería ocurre después de que congresistas estadounidenses legitimaron las denuncias sobre al menos 17 mujeres que fueron sometidas a cirugías innecesarias, incluyendo histerectomías, en un centro migratorio en Irwin, en el sur de Georgia.
Organizaciones civiles presentaron el lunes una queja ante el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) basada en el testimonio de Dawn Wooten, una enfermera que trabajó en esa prisión, donde denunció “prácticas peligrosas”, incluyendo la extirpación del útero de mujeres para su esterilización.
El Consulado mexicano “ha solicitado información detallada a las autoridades a fin de esclarecer las posibles afectaciones a ciudadanas mexicanas, así como información sobre los procedimientos realizados y la justificación correspondientes”, según la Cancillería.
La Secretaría de Relaciones Exteriores reveló la denuncia de una ciudadana mexicana contra autoridades migratorias de Texas, quienes la habrían agredido sexualmente. “Con relación a los señalamientos de abuso sexual en contra de una ciudadana mexicana por parte de agentes de ICE en El Paso, Texas, el Consulado de México en esa ciudad mantiene contacto con la presunta víctima y su abogada para brindarle todo el apoyo consular necesario”, aseveró el Gobierno.
Miembros de la administración de Donald Trump ha elevado la presión migratoria sobre México, cuyo Gobierno ha aceptado la implementación de políticas como el Remain in Mexico (Quédate en México) y el despliegue de la Guardia Nacional en la frontera con Centroamérica. Sin embargo, la Cancillería prometió comunicación con las autoridades estadounidenses para “esclarecer los hechos”, identificar a mujeres mexicanas afectadas y garantizar el respeto a sus derechos.
“La SRE reitera su compromiso con la protección de las personas mexicanas en el exterior, así como sus principios de una política exterior feminista. El Gobierno de México expresa su rechazo absoluto de cualquier violación a los derechos humanos de las personas mexicanas”, concluyó.