Torreón, Coahuila. – El Gobierno del Estado solicitó la intervención del Sistema de Administración Tributaria (SAT) y de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), a fin de llegar hasta las últimas consecuencias en el caso de la boda que se celebró en San Pedro, amenizada por el cantante de banda Julio Preciado.
La semana pasada en el ejido Alejo González, de aquel municipio, fue cancelada la boda en la que había exceso de invitados y sin ninguna medida sanitaria, pese a la pandemia de coronavirus, pues ni el artista ni sus músicos y mucho menos los más de 300 invitados portaban cubrebocas.
El día de hoy, el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, en la conferencia de prensa que ofreció en esta ciudad, dijo que esa concentración no debió realizarse; sin embargo, hubo presencia de gente adinerada con todo y personal contratado que evitaban a la Policía Estatal y a la Guardia Nacional el ingreso a la finca donde se realizaba.
Manifestó que todo esto se está investigando a través de la Unidad de Inteligencia Financiera, en respuesta a una denuncia interpuesta por el Gobierno del Estado, con la finalidad de investigar si hay responsabilidades añadidas a lo que inició solo como una falta administrativa.
Se busca ahondar en las condiciones relacionadas con las que el sábado 12 de septiembre se realizó el festejo, dando continuidad a la carpeta de investigación que se abrió en contra de quienes resulten responsables de la organización de evento y las implicaciones que se deriven, revisando también la parte financiera, además de las faltas administrativas en las que se incurrió.
“Queremos aclarar cómo y quién pagó a los grupos que amenizaron y es parte de la información que hemos solicitado, porque no se trató de un evento común, hay la contratación de artistas y grupos musicales”, señalo.