Por Enrique Aranda
Preocupa cáñamo industrial
¿Dijo 100,000 en contra, no? A las pruebas…
Si bien, aunque no con la celeridad que algunos desearían, el asunto parece avanzar en el ámbito legislativo, lo cierto es que la eventual aprobación del uso de la mariguana con fines medicinales, presumiblemente lúdicos, parece comenzar a enfrentar nuevas presiones y escollos promovidos por empresarios privados que, conscientes de lo que ello podría implicar para sus respectivos negocios, han decidido oponerse al uso del cáñamo a nivel industrial.
A juzgar por lo ocurrido en los últimos meses, la sola comprensión del potencial impacto —“económico, se entiende…”— que el uso del cannabis industrial podría tener en sectores vinculados a la producción de plásticos, papel, textiles, combustibles, fibras y hasta alimentos ha generado tal preocupación que no son pocos ahora, ni despreciable en forma alguna su fortuna o influencia, los representantes del capital empeñados en bloquear o diferir al menos tal posibilidad…
Y ello preocupa al Legislativo, al Senado en particular donde, si bien no con la velocidad que se quisiera, el asunto avanza apoyado tanto por el coordinador de la mayoría morena, Ricardo Monreal, como por sus contrapartes de la oposición que avalan seguir por una ruta que, sometida a controles extremos, evite que los sectores agrícola y farmaceútico mexicanos sean excluídos de la posibilidad de beneficiarse de la explotación ordenada del cannabidiol o CBD, como se le conoce.
Ahí, a manera de evidencia, está el encuentro que el mandamás de la Asociación Nacional de la Industria del Cannabis, Guillermo Nieto, sostuvo hace apenas el jueves con el exgobernador zacatecano para, entre otras cosas, evaluar el avance de la iniciativa y el aporte que el sector privado puede hacer para su eventual aprobación y, también, informarle sobre la incorporación formal de la Anicann al Consejo Nacional Agropecuario (CNA), que lidera Juan Bosco de la Vega, una acción que implica el reconocimiento de la existencia e importancia de la actividad.
Ya veremos…
ASTERISCOS
* Tan injustificable como el proceder que en su momento se acreditó al exdiputado y operador morenovallista Eukid Castañón, panista, la evidente persecución política emprendida en su contra por el impresentable gobernador Miguel Barbosa, neomoreno poblano, y la UIF del “precandidato” Santiago Nieto. Por lo pronto, la notaría que le había sido asignada ya le fue retirada.
* Revelador de cómo es que están las cosas en el país el inusual cierre de filas de Gustavo de Hoyos con el cuestionado Javier Corral y la llamada Alianza Federalista “ante la insólita e intransigente actitud de Andrés Manuel López Obrador”, quien omitió al gobernador en su visita a Chihuahua y que, el primero, califica como “acometida del neocentralismo despótico”.
* Inexplicable, por decir lo menos, la decisión de la mayoría morena del Congreso capitalino de entregar la dirección de su canal televisivo a Diego Saturno, el mismo a quien hace apenas unos meses más de uno se refería como “sepulturero” —por encargo del antiguo ayuntamiento, se dijo entonces— del Canal 21, de cuya señal se beneficia ahora. ¡Ver para creer!…
Veámonos aquí mañana, con otro asunto De naturaleza política.