Conocida actualmente en el mundo entero como apóstol de la Divina Misericordia.
Nació en una aldea en Polonia, cerca de Lodz, el 25 de agosto de 1905, fue la tercera hija entre diez hermanos. Desde los primeros años de su vida sintió el deseo de entregarse a Dios por completo.
Fue llamada a la vida religiosa durante una visión que tuvo de Cristo sufriente. Respondiendo a las gracias de Dios, ingresa a la comunidad de las hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia en Varsovia, Polonia, el 1 de agosto de 1925, tomando el nombre de Sor María Faustina del Santísimo Sacramento.
Sor María Faustina aceptó la invitación de Jesús para convertirse en su apóstol y secretaria y para anunciar al mundo el grandioso mensaje de la Misericordia de Dios: “Te envío a tí a toda la humanidad con Mi misericordia. No quiero castigar a la humanidad doliente, sino que deseo sanarla. Abrazarla a Mi corazón Misericordioso” (Diario, 1588). Tú eres la secretaria de Mi misericordia; te he escogido para este cargo, en esta y en la vida futura (Diario, 1605), (…) para que des a conocer a las almas la gran misericordia que tengo con ellas, y que las invites a confiar en el abismo de Mi misericordia” (Diario, 1567). “La humanidad no conseguirá la paz hasta que no se dirija con confianza a Mi misericordia” (Diario 300).
La misión de Santa Faustina consistió en tres tareas principales:
-Recordar al mundo y a la Iglesia la verdad de la misericordia de Dios para cada ser humano, tal como se revela en las Sagradas Escrituras.
-Implorar la misericordia de Dios a todo el mundo, especialmente para los pobres pecadores, practicando nuevas formas de devoción a la Divina Misericordia: La Imagen de la Divina Misericordia, La Fiesta de la Misericordia, La Coronilla a la Divina Misericordia, La Hora de la Misericordia y Proclamar la Misericordia.
-Iniciar el movimiento apostólico de la Divina Misericordia, cuyos seguidores proclaman y suplican la misericordia de Dios para el mundo entero, y se esfuerzan por practicar las obras de misericordia, siguiendo el ejemplo de la Hermana Faustina.