
Fue a la altura del kilómetro 24 de la carretera que conecta a Ramos Arizpe con Nuevo León, en donde una camioneta de la marca GMC en color rojo terminó saliendo del camino debido al estallido de uno de sus neumáticos delanteros, lo que provocó el descontrol de la unidad y que el conductor nada pudiera hacer por evitar que toda su tripulación terminara con lesiones.
La falta del uso de cinturón de seguridad de algunos de los que viajaban en la pick up, provocó que sus lesiones fueran mayores, pues la velocidad a la que estalló la llanta generó fuertes golpes al momento de controlar la camioneta que afortunadamente no volcó.
Tras recibir el reporte al 911, elementos del cuerpo de Bomberos y Protección Civil de Ramos Arizpe se dieron cita al lugar, en donde inmediatamente se dio atención a los lesionados y solicitaron refuerzos a su base, debido a la cantidad de heridos en el lugar, por lo que fueron necesarias tres de las ambulancias de esta corporación municipal.
Un código rojo fue activado por la ambulancia 481, la cual transportó al herido a la clínica número 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social, el paciente identificado como Eduardo Hernández Guzmán, originario de Apodaca, Nuevo León; de igual manera la ambulancia 482 viajó al IMSS 2 en código amarillo con dos mujeres una de 18 años de edad identificada como Devany Xiomara Hernández Álvarez y la señora Ancelina Vargas de 76 años; posteriormente la unidad identificada con el número 28 traslado a una mujer de 39 años de nombre Elvia Robles Rodríguez y dos menores al nosocomio para su atención, estos presentaban solamente golpes menores.
Sobre el conductor de la unidad, quien fue el más grave de los lesionados, se indicó que presentaba traumatismo cráneo cefálico, una herida de aproximadamente 15 centímetros de longitud, que fue controlada en el lugar del accidente por los paramédicos, para evitar que perdiera más sangre, pero se trasladó de inmediato al hospital para su atención pertinente.
La camioneta afortunadamente no presentó daños graves en la carrocería, pues con tan solo reemplazar el neumático averiado podrá volver a circular sin problema alguno, se desconoce si el estallido se dio por pisar algún objeto en la carretera, o fue la velocidad y la presión del aire la que se encargó de reventarlo.