La mano del General Salvador Cienfuegos, Secretario de Defensa en el Gobierno de Enrique Peña y detenido en Los Ángeles bajo cargos criminales de narcotráfico, sigue presente en la actual Administración federal.
Ex cuadros operativos (Generales de Brigada y Brigadieres) que operaron de manera cercana a Cienfuegos están en cargos claves de la seguridad nacional.
El actual titular de la Sedena, General Luis Cresencio Sandoval, fue primero subjefe operativo en la Secretaría, después fue transferido a la Cuarta Región militar en Nuevo León, en la gestión de Cienfuegos; Sandoval no era de su equipo cercano.
De los considerados como cercanos a Cienfuegos estarían el General André Foullon, actual subsecretario de la Defensa Nacional, quien comandó la Tercera Región militar, con sede en Sinaloa, estratégica en las operaciones castrenses y sede del cártel más importante y que, según las indagaciones estadounidenses, era protegido por Cienfuegos.
Homero Mendoza, Jefe del Estado Mayor de la Sedena, General ascendido a Divisionario, fue con Cienfuegos Comandante de la Décima Zona Militar en Durango.
Gabriel García Rincón fue en el sexenio pasado Comandante de la Segunda Región Militar en Baja California. Ahora es el Inspector y Contralor de la Sedena.
El Oficial Mayor de la Sedena -por quien pasan los gastos y decisiones administrativas centrales- es Agustín Radilla. Con Cienfuegos fue Comandante de la Séptima Zona Militar en Nuevo León.
El General Alejandro Saavedra, que dirigía la 35 Zona Militar en Chilpancingo cuando desaparecieron los normalistas de Ayotzinapa, ahora es el encargado de los beneficios sociales de la tropa desde el ISSFAM.
El ex Comandante de la 22 Zona Militar en el Edomex, José Luis Sánchez León, hoy es Director de la Industria Militar. Cuando las ejecuciones de civiles en Tlatlaya, uno de los casos más graves de violación a derechos humanos en la gestión de Cienfuegos, Sánchez León era el responsable en la zona.
Otros Generales de Brigada y de Brigadieres que estuvieron a las órdenes de Cienfuegos fueron ascendidos y actualmente fungen como mandos en Regiones y Zonas Militares como el General Pedro Felipe Gurrola Ramírez, quien pasó de ser Inspector y Contralor con Cienfuegos, a Comandante de la Quinta Región Militar en Jalisco, en el actual Gobierno.
Las conexiones de Cienfuegos parecieran vigentes; al menos así lo consideró la misma Fiscalía Federal para el Este de Brooklyn, donde radica su caso, al considerar que tiene cómplices para huir.
Al pedir su detención sin derecho a fianza, la Fiscalía indica que, de regresar a México, tendría colaboración de narcos o funcionarios corruptos para no ser arrestado.
«Como la conducta criminal del acusado evidencia, no tiene respeto por la autoridad o la ley, y previamente ha puesto en peligro la seguridad de agentes estadounidenses y sus testigos, al revelar el estatus de investigaciones contra el Cártel H-2 a sus dirigentes, por lo que no hay razón para creer que respetará las condiciones de libertad que le imponga la Corte», afirmó el fiscal Seth DuCharme.
Ayer, el Presidente López Obrador advirtió que quienes resulten involucrados en el caso Cienfuegos, que estén en el actual Gobierno o en la Sedena, «van a ser suspendidos, retirados y, si es el caso, puestos a disposición de las autoridades competentes».
‘El Padrino’ mexicano
Para el Departamento de Justicia de EU, el ex Secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, era «El Padrino».
Según la acusación estadounidense, entre 2015 y 2017, a cambio de sobornos, protegió a cárteles y ayudó al tráfico marítimo y terrestre de cocaína, heroína, metanfetaminas y mariguana.
La prueba más sólida es la tutela del Cártel H-2, grupo criminal de Nayarit.
La acusación contra Cienfuegos data de agosto de 2019 y sólo esperaban el momento que pisara Estados Unidos para capturarlo.
Los cargos imputados son conspiración internacional para manufacturar, importar y distribuir narcóticos, así como por un cargo de lavado de dinero.
La acusación contra Cienfuegos, a quien se identifica como «El Padrino» o «Zepeda», fue presentada desde el 14 de agosto de 2019 ante la Corte para el Distrito Este de Nueva York, en Brooklyn, que ayer autorizó su publicación La acusación señala que las actividades criminales de Cienfuegos ocurrieron entre diciembre de 2015 y febrero de 2017.
En carta paralela a la Corte, la Fiscalía Federal para el Este de Brooklyn lo acusó de proteger al cártel.
«A cambio de sobornos, asistió al Cártel H-2 de numerosas maneras, entre ellas, asegurarse que no hubiera operaciones militares en su contra; iniciando operaciones militares contra sus rivales; consiguiendo transporte marítimo para cargamentos de drogas; actuando para expandir el territorio controlado por H-2 a Mazatlán y el resto de Sinaloa», afirmó la Fiscalía.
Ayer, Cienfuegos escuchó los cargos en el centro de detención de Los Ángeles. El juez Alexander MacKinnon ordenó que permanezca detenido sin derecho a fianza hasta otra audiencia el martes próximo.