
A pesar del aumento de casos e incremento de la ocupación hospitalaria en Coahuila, la gente continúa apática a las recomendaciones implementadas por la Secretaría de Salud, lo que ha provocado el repunte de pacientes en la entidad.
Es por ello que las autoridades municipales han intentado aplicar medidas de concientización entre la ciudadanía.
Desde el inicio de la reactivación económica, en Ramos Arizpe apareció la vigilancia Covid-19, los cuales buscan cuidar el uso del cubrebocas y se cumpla el distanciamiento social, mismos que reparten este tipo de protectores faciales fabricados en el DIF Municipal.
Con esta vigilancia Covid, se reduce también el número de trabajadores que se encuentran regularmente en la Presidencia Municipal, predicando con el ejemplo la sana distancia.
Así es como gran parte de la fuerza laboral del municipio, cuida mercados, transporte público y distintos puntos de esta ciudad.

“Hay días más pesados que otros, en ocasiones nos quedamos con los cubrebocas que vamos a repartir porque la gente ya los trae, pero sí hay días que nos acabamos por completo los cubrebocas y hasta nos faltan”, indicaron los guardianes Covid.
Añadieron que la gente no hace caso y solo se burlan de su labor: “Pasan, les pedimos que se pongan el cubrebocas y nada más nos dicen que sí, pero siguen caminando y no lo hacen”. Esta situación fue atestiguada por La Prensa de Ramos Arizpe, pues en el momento en el que dos mujeres pasaron sin cubrebocas, los vigilantes solicitaron que se las colocaran o en caso de necesitar unas mascarillas nuevas, se las podrían proporcionar, a lo que estas únicamente se limitaron a decir que “sí”, pero siguieron su camino sin colocárselas.
Los entrevistados indicaron que este esfuerzo es de todos, a estas alturas de la pandemia ya la gente conoce sus obligaciones y sus responsabilidades, por lo que pidieron que se sumen al combate del Covid-19 para lograr reducir los contagios.