CIUDAD DE MÉXICO.-A casi un mes de que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantiene bloqueadas las vías del tren en Michoacán, la industria mexicana reporta pérdidas de alrededor de 22 mil millones de pesos, de acuerdo con la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
En un principio, a finales de septiembre, sólo les permitieron un máximo de tres días de bloqueos continuos; pero ante la inacción de autoridades federales y estatales, los manifestantes se han plantado sin problema desde el 2 de octubre sobre la red que cruza la localidad de Caltzontzin, en Uruapan.
Hasta el 30 de octubre se mantenían varadas 60 toneladas de granos básicos en el puerto de Lázaro Cárdenas, 5 mil toneladas de granos en trenes, y están paralizados también 4 mil 904 contenedores.
El presidente de la Comisión de Transporte de Concamin, Felipe de Javier Peña, explicó que se están generando sobrecostos por cambios de transporte y rutas, así como alertas de paros en industrias y daños no sólo a grandes empresas, sino también medianas y pequeñas.
Las principales empresas afectadas, dijo, se encuentran en el centro del País, en el Bajío (del ramo automotriz), en la región norte (la industria acerera); la petroquímica, con el combustóleo que sale desde la refinería en Tula, y necesita llegar a Lázaro Cárdenas.
Y las tiendas de autoservicio, con mercancías que tienen su entrada a Estados Unidos, por la vía de Texas.
«Gran parte de las afectaciones es porque están dejando de percibir su dinero por cambio de ruta. Hay cosas que pueden salir vía camión, pero si tienen rutas muy largas, no hay forma de que eso compita con el tren. Las empresas por falta de insumo, hacen compras de emergencia para no parar la planta», aseguró.
Respecto al comercio exterior, Peña explicó que hay reportes de barcos que están cambiando su ruta de Lázaro Cárdenas hacia Estados Unidos o el canal de Panamá, para después trasladar las mercancías nuevamente hacia México.
«Optan por cambiar la ruta e irse a otro puerto. Ojalá sea a Manzanillo, pero no tienen capacidad para tantos graneles, entonces se van a otro puerto de Estados Unidos o por el canal de Panamá, algo que genera un sobrecosto inmenso, pero es mejor a tener paros técnicos en las plantas, se asumen costos gigantescos», añadió.
La Concamin lanzó un llamado a que las autoridades tanto federales como estatales se unan para hacer valer el Estado de derecho.
Al respecto, Carlos Enríquez Barajas, presidente de la Asociación de Industriales del Estado de Michoacán (Aiemac), calificó como intolerable que por 30 días la ruta esté tomada.
«Es un punto que ya pone a temblar decisiones de la industria. Genera una percepción de que nos manejamos en un esquema de incertidumbre, fuera del margen jurídico», reprochó.
Mientras tanto, los integrantes insisten en su demanda de pago de bonos retrasados, así como plazas de trabajo para normalistas egresados.