Tras la puesta en marcha de 17 pozos de agua potable, en 2021 se trabajará en la reposición de las líneas de conducción a fin de garantizar que el vital líquido llegue a toda la población y con más volumen, confirmó el alcalde José María Morales Padilla.
“En tiempo de frío, en tiempo de calor, en tiempo de sequía: más agua, más presión”, dijo el edil al explicar que la estrategia contemplada para el último año de su administración está orientada a distribuir de mejor forma el caudal de agua que hay disponible.
Destacó que, este año, quedarán en operaciones cinco nuevos pozos de agua potable localizados en Lomas del Valle, el Cerro de las Coloradas y otro más en Fidel Velázquez que, en suma, generan más de 100 litros de agua por segundo.
Dichas obras se suman a los 12 pozos que entraron en funciones en 2019, de manera que con un mayor caudal de liquido lo que sigue es trabajar para que haya una distribución optima, sin fugas.
“El año que entra no voy a perforar pozos, sino que nos vamos a dedicar a la conducción y a la distribución. Estamos rehabilitando el cárcamo de Villa Magna que tiene más de un millón de litros, de ahí podremos distribuir agua al oriente, al poniente y al centro”, explicó.
Se rehabilitará el cárcamo ubicado en el Gimnasio Municipal para distribuir el agua extraída desde San José de los Nuncio hasta la colonia El Mirador.
Además de que se habilitará un cárcamo de almacenamiento en la plaza del CETIS, desde donde se inyectará presión para las colonias Manantiales del Valle y Blanca Esthela.