Ante la alta incidencia de casos de Covid-19, el gobierno de Ramos Arizpe descartó la realización de eventos especiales por fin de año, así como las peregrinaciones a la Virgen de Guadalupe.
El alcalde José María Morales Padilla se sumó a la medida anunciada por el presidente municipal de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas, a fin de suspender desfiles navideños, ventas por fin de año, y algunas actividades religiosas que concentran a un elevado número de personas.
“No habrá en Saltillo ni aquí. Estamos trabajando en un Subcomité Regional en el Sureste y estaremos al pendiente para evitar cualquier tipo de aglomeración”.
Coincidió en la necesidad de evitar actividades no esenciales, a fin de reducir el riesgo de contagios.
Por lo que refiere a las posadas de los centros de trabajo, reiteró que la autorización dependerá de la ocupación hospitalaria en el Sureste al mes de diciembre.
Recordó que los salones de eventos sociales tienen una capacidad limitada de asistentes, por lo que eso también frenaría las tradicionales reuniones.
“Hemos estado tomando decisiones muy responsables en base a la ocupación hospitalaria, y a los ventiladores que tenemos disponibles, habría que revisar el comportamiento y así tomar las decisiones. Se buscará que todos cumplamos los protocolos, y veremos si se pueden realizar o no, y en caso de que puedan realizarse bajo qué condiciones”.
Consideró importante la reactivación económica que conlleva la realización de posadas, sin embargo, insistió en la prioridad de cuidar la salud.
“En caso de que lleguen a hacerse tendrían que ajustarse a la asistencia de ciento cincuenta personas, pero es algo que todavía estamos por definir”.