
El Gobierno mexicano decidió cortar el suministro de gas natural a Etileno XXI, con lo cual detuvo totalmente la operación de este complejo petroquímico, propiedad de la brasileña Braskem, filial de Odebrecht, y la mexicana Idesa.
La empresa informó que el Centro Nacional de Control de Gas Natural (Cenagas) decidió interrumpir los servicios de transporte de gas natural.
El martes, a las 23:00 horas, personal de la Secretaría de Marina, la Guardia Nacional y de Pemex llegó a la caseta de medición a cerrar la válvula de gas, sin previo aviso a la planta, según aseguraron fuentes.
Además del convenio para el transporte de gas, Etileno XXI tiene un contrato con Pemex para suministro de etano, el cual fue suscrito en la administración de Felipe Calderón.
Ayer, AMLO argumentó que no se renovó el contrato de gas debido a que no se ha corregido el de etano, el cual calificó como «leonino».
Eduardo Prud’Homme, ex funcionario del Cenagas, dijo que usualmente los contratos se cancelan sólo por falta de pago.