La Cooperativa La Cruz Azul prometió acciones radicales en La Máquina, como revisar los contratos de jugadores, cuerpo técnico y directiva, tras la infame caída contra Pumas en la Semifinal del torneo Guardianes 2020.
La institución condenó al equipo de la Primera División por su mediocridad táctica, mentalidad derrotista, así como la falta de hambre, hombría deportiva y vergüenza.
La empresa reconoció la caída del domingo contra Pumas como la peor derrota en la historia, lo que, sostuvo, exige una sacudida sin precedentes, que incidan en el compromiso con la afición y con la propia institución.
“El domingo pasado, por el contrario, vimos una mentalidad derrotista, timorata, carente de hambre y hombría deportiva. En consecuencia, es y será el deber de esta nueva directiva dar la cara a los grandes aficionados del equipo quienes entregaron partido a partido y minuto a minuto, todo su coraje y pundonor sin que lamentablemente pudieran encontrar eco alguno dentro de la cancha.
“Sin embargo, la seriedad a la que nos convoca representar al futbol mexicano en el torneo de Concachampions que inicia la próxima semana, y ante las bajas por Covid del equipo, nos vemos obligados a encarar este capítulo con lo que disponemos”, expuso la Cooperativa.
Lo único que por ahora salva al Técnico Robert Dante Siboldi y a los jugadores es el compromiso en Concacaf, que da el pase al Mundial de Clubes. Disputa un partido único de Cuartos de Final frente a Los Ángeles FC, del mexicano Carlos Vela.
No es asunto menor lo que ocurrió en Cruz Azul. Se trata del primer equipo en la historia de las Liguillas en permitir que le remonten una ventaja de 4-0 en el partido de ida, como pasó ante Pumas.
Además, ese episodio se suma a otros pasajes en la historia reciente del club, en particular las derrotas en las Finales contra el América. Por eso el fin de año pinta complicado para los integrantes de la plantilla de la Primera División.
“Ello significa que, al final este torneo, nos detendremos en una revisión exhaustiva de los contratos y el rendimiento de cada uno de los jugadores, con objeto de renovar a fondo los cimientos deportivos de la organización”, informó la Cooperativa La Cruz Azul.
Asimismo, prometió imponerse a los “oscuros intereses de comercialización”.
“Se privilegiará el sentido de pertenencia y el amor a la camiseta por encima del pragmatismo que aprecia al equipo a partir de su interés comercial. Nos referimos a que jugadores, cuerpo técnico y directivo deberán ser ejemplo de los valores de la institución y reflejar con su conducta dentro y fuera de la cancha, el compromiso, el hambre de triunfo y la mentalidad ganadora de nuestra afición”, informó.
Eso implica que quien no esté a la altura de la exigencia del club, a decir de la institución, no tendrá más cabida en la plantilla. Se cumplieron ya 23 años del último título de La Máquina, aquel contra León en la Final del Invierno 97.
En el juego contra Pumas, uno de los que falló fue el casi siempre confiable canterano Julio César Domínguez, pero otro se quedó guardado casi todo el partido fue nada menos que Santiago Giménez, quien entró en la compensación, ya en una medida desesperada.
“Al mediano plazo, la única forma de renovar este espíritu será regresando al origen. Debemos volver a trabajar con nuestras fuerzas básicas para garantizar que la mayoría de nuestros jugadores lleven en la sangre el orgullo azul.
“Pensamos que sólo así podremos trascender el peso de los intereses comerciales que han dominado el deporte y sembrar los principios de una cultura social y deportiva que lleve en su sangre los valores de Cruz Azul y de México”, publicó la empresa.
La Cruz Azul acotó que los jugadores extranjeros tienen abiertas las puertas, en esta construcción de la Nación Azul, siempre y cuando compartan los valores de la institución.
