Los fines de semana son un “boom” económico para el Pueblo Mágico de la Región Sureste de Coahuila, dejando una importante derrama económica en el sector restaurantero y hotelero, al recibir familias de todo el estado, del interior del país y hasta de Estados Unidos.
Sin embargo, el turismo se convierte cada lunes en un dolor de cabeza para los habitantes de Arteaga, pues las visitas de los foráneos generan toneladas de basura que personal de Servicios Primarios del Ayuntamiento y Vigilancia Ambiental deben colectar cada semana, pues la cultura de tirar los desechos en su lugar, es olvidada por los turistas.
Personal de Presidencia cumple con la labor de barrer las plazas y recolectar la basura, pero en ocasiones la gente cree que, con colocar la basura en las afueras de las entradas de los ejidos u otros municipios, cumplen con apoyar a los recolectores del Ayuntamiento, pero en ocasiones los perros llaneros se encargan de destrozarlas y regar la basura por toda la orilla de la carretera.
“Sí es un problema, la gente cree que es responsabilidad de los recolectores de basura, y claro ellos levantan las bolsas y la gente de Vigilancia Ambiental apoya también, pero es necesario que las personas pongan la basura en los botes o contenedores, para evitar este tipo de desorden que se da especialmente en las entradas de los municipios”, indicó Gabriel Orsua, Director de Turismo.
Otro problema que se viene dando durante la reactivación económica de Arteaga, es el encontrar cubrebocas tirados por las calles de este lugar, ya que la gente regularmente compra un elote o algo de comer en los puestos que se instalan los domingos y para comer se retiran el cubrebocas y terminan lanzándolo hacia la banqueta.