
Palaú Coah. – La pandemia del Covid-19, terminó con una hermosa tradición de más de medio siglo en el Mineral de Palaú, donde cada año, desde las primeras horas del 12 de diciembre, Día de la Virgen de Guadalupe, matachines, danzaban durante largas jornadas en honor de la Patrona de México.
Juan Silva, integrante de la danza apache “Los Milas de Palaú”, aseguró que fue la contingencia sanitaria del Coronavirus, lo que en esta ocasión terminó con 50 años ininterrumpidos de este tipo de actividades, dificultando además la situación económica de danzantes que durante todo el año tenían presentaciones en domicilios particulares.
Dijo que fueron las autoridades estatales de Salud, quienes emitieron las indicaciones para que se parara la actividad de los matachines, ya que en donde se presentan a danzar, se concentran muchos espectadores y esto genera un punto de contagio de COVID-19 entre las personas.
Juan Silva señalo que para atender las disposiciones de salud es que decidieron acatar dichas indicaciones, pero que además les dejaron bien claro que no hacerlo los danzantes se hubieran hecho acreedores a sanciones económicas que oscilan entre los 5 mil a 30 mil pesos.
“Es mucho dinero que no estamos en condiciones de solventar especialmente en estos momentos”.
Destacó que los ingresos por la contratación de sus servicios es lo que ellos invierten para el pago del tamborero, y la elaboración de los atuendos que incluyen penachos, y tienen un costo de 3 mil pesos cada uno y tardan hasta 6 meses en estar listos para ser usados por los danzantes.
Los matachines esperando que el año que entra las condiciones de salud les permitan retomar esta actividad, Juan Silva pidió a la sociedad en general tomar conciencia de la magnitud de la presencia del COVID-19 entre la población, especialmente de la rapidez con la que se contagia y lo mortal que es para que no bajen la guardia en lo más mínimo en cuanto a los protocolos de prevención.