CIUDAD DE MÉXICO.-Si en tribunales no puede, la CFE intentará sacar de facto a los generadores de energías limpias que operan en el mercado mexicano.
Ayer, en la tercera conferencia de prensa que intenta explicar por qué ocurrió un macro apagón de casi dos horas el pasado 28 de diciembre, Manuel Bartlett y su equipo, señalaron a las centrales de energía fotovoltaica y eólica como la razón de ese fallo.
Con el apagón que afectó a casi todo el País, la empresa eléctrica cerró un año caracterizado por el asedio contra los generadores privados, quienes han acudido a los juzgados para frenar medidas administrativas que buscan sacarlos del mercado.
En los últimos días, un juez declaró inconstitucional el aumento de entre 407 y 775 por ciento a las tarifas de transmisión que CFE cobra a los privados con proyectos renovables de autoabasto.
Fue el quinto revés para el Gobierno que ha lanzado regulaciones en contra de estos proyectos, todos ellos suspendidos y declarados inconstitucionales.
Ahora, a propósito del apagón, la CFE informó que ordenará al operador del sistema eléctrico, el Centro Nacional de Control de Electricidad (Cenace), sacar de operación parte de la generación de las centrales verdes.
Según esa postura, lo hará para asegurar la confiabilidad del sistema eléctrico, pues en el momento del apagón la generación con esas fuentes representaba el 28.5 del total de la demanda, cifra históricamente alta.
La CFE refrendó que el apagón se debió al incendio de pastizales en un predio de Tamaulipas, cuyo humo y cenizas ionizaron el aire y provocaron un desbalance entre generación y transmisión. Ello sacó de operación a 18 centrales que dejaron de generar 9 mil 300 megawatts.
«Como medida preventiva en demandas bajas, el Cenace se verá obligado a sacar de operación parte de la generación renovable intermitente para asegurar la confiabilidad del sistema nacional», aseguró la CFE.
Agregó que el sistema nacional no puede operar con exceso de generación intermitente y el Cenace está obligado a limitar la capacidad máxima a generar en cada nodo para asegurar la confiabilidad.
«Esto implicará para los generadores privados reducir su producción anual».
En el informe de Bartlett y los directores de transmisión y operaciones, Noé Peña y Carlos Morales Mar, no participaron representantes del Cenace, ni de la Comisión Reguladora de Energía ni de la Secretaría de Energía.