Por: Daniel Muñoz
Una mujer y su hijo de cinco años, fueron detenidos injustamente por Policías Municipales, únicamente porque pedían caridad en el exterior de un centro comercial, siendo trasladados a la comandancia, en donde el juez calificador ordenó su inmediata libertad debido a que no habían cometido ningún delito.
Fue la mañana de ayer cuando Elementos Preventivos realizaban recorridos por la colonia Anáhuac, cuando al llegar al centro comercial denominado Soriana, observaron a una mujer con su pequeño hijo de cinco años.
Ambos pedían ayuda a las personas que llegaban al establecimiento, al asegurar la madre que no había podido conseguir trabajo y que buscaba la manera de conseguir ayuda económica para poder alimentar a su hijo.
Los policías inmediatamente procedieron con su aseguramiento, sin importarles las suplicas de la desesperada madre, siendo llevada a la comandancia junto a su pequeño hijo.
El juez calificador escuchó lo que la mujer tenía que decirle y cuestionó a los oficiales sobre el motivo de la detención, los cuales argumentaron que lo hicieron para salvaguardar la integridad de ambos.
Al no existir ningún delito, ni falta administrativa que hubieran cometido, se ordenó que fueran dejados en libertad inmediatamente.