
Después de que se mantuvieron los restaurantes en la modalidad “sólo para llevar” desde el pasado 25 de diciembre, finalmente a partir de este día abrirán sus puertas estos establecimientos en un aforo del 30 por ciento, mientras tanto, restauranteros reportan pérdidas importantes debido a que para ellos las dos últimas semanas representaban fuertes ventas.
Desde que se dio a conocer la decisión tomada por el subcomité Técnico de Salud Covid-19 en la Región Carbonífera, el pasado mes de diciembre esto ocasionó la molestia de los propietarios de estos negocios ya que algunos de ellos habían invertido para seguir laborando con un aforo del 50 por ciento como se tenía contemplado.
Algunos restaurantes decidieron cerrar sus puertas, otros reajustaron personal debido a que ya no podían seguir manteniendo estos gastos.
Mauricio Jaime Arellano, empresario, señaló que el ramo restaurantero ha sido uno de los giros más golpeados desde que inició la pandemia por el Covid-19 ya que se mantuvieron cerrados por varios meses y cuando abrieron sus puertas tuvieron que invertir para aplicar los protocolos de salud de prevención.
Señaló que los gastos siguieron, el pago del recibo de la luz, el pago de salarios, gastos, impuestos siguen y aun así han buscado la manera de poder seguir haciéndole frente a esta situación de salud.
Las dos últimas semanas del año representan fuertes ventas para este tipo de negocios, sin embargo, la decisión tomada por el subcomité Técnico de Salud Covid-19 tuvo que ser respetada por todos los restaurantes y puestos vendedores de tacos.