Por Antonio Zamora
El show de Santa Lucía. Aterrizaron aviones comerciales, pero sin pasajeros. Se informó oficialmente que en esa pista no van aterrizar ese tipo de vuelos…
Dicho en otras palabras, dos puntos y seguido: Puro Show en la inauguración del aeropuerto sin aeropuerto…
Es más dicen los enterados, a mi no me crean ni tantito, que el Aeropuerto Santa Lucía se parece más a un súper de Bodegas Aurrera que a un aeropuerto quesque internacional…
Es más, Pedro Ferriz aseguró que lo inaugurado fue una pista de aterrizaje que ya estaba ahí..
Y Chumel Torres explicó: Primero la rifa sin avión, luego una campaña de vacunación sin vacunas…
Ahora aviones de pasajeros sin pasajeros aterrizando en un aeropuerto sin pistas…
Eso pasa cuando tenemos un candidato en vez de un presidente…
En el Congreso del Estado se aprobó por unanimidad el punto de acuerdo de la diputada local, Martha Loera, en donde exhortó al Presidente a considerar a las personas con discapacidades como grupos prioritarios en los planes de vacunación contra el Covid-19…
El empresario Claudio X. González tuiteó: “Los mexicanos nunca vamos a olvidar…”
“Cuando todo esto pase y hagamos un recuento de nuestros muertos, de las empresas quebradas, los bolsillos vacíos y los corazones dolidos por el horror vivido…
Los mexicanos nunca vamos a olvidar que preferiste un estadio de beisbol, una refinería no rentable, un aeropuerto inviable y un tren destructor”
¿Sabían ustedes que el crecimiento acumulado en los dos primeros años del neoliberal Salinas fue de 9.1 por ciento?
¿Y también sabían que el crecimiento acumulado en los dos primeros años del antineoliberal López es de menos 8.6 por ciento?
¿Cómo se llamó la obra?
Primer acto: Laboratorios Pfizer ofrece a México vacunas gratis para completar su protocolo de pruebas con los conejillos de indias mexicanos…
Segundo acto: El presidente de México dice a los conejillos que ya se firmaron los acuerdos de compra de vacunas y que se van a invertir $120,000’000,000 ( léase bien, ciento veinte mil millones de pesos) para que todos alcancemos…
Tercer acto: La ONU da a conocer la lista de países que ya firmaron contratos de suministro, con fechas, cantidades y montos. México no está en la lista…
Cuarto acto: Llegan por fin las tan anheladas vacunas (las gratis para pruebas)… 3,000 vacunas…
Las reciben todos los borregos mayores al pie del avión de mensajería, con recepción de Estado y desfile del ejército…
Tanquetas, helicópteros, policías cerrando vialidades al paso, cobertura total de medios. Festejo en Palacio Nacional…
– ¡Ya ven que sí las compramos!
– ¡Misión cumplida!
Quinto acto: Los contratos estarán guardados bajo llave por cinco años, nadie puede verlos. Pero no duden del presidente, «él no tiene ambición»…
Sexto acto: A tres semanas de recibir otras tantas vacunas de Pfizer, el presidente se ufana dando cifras de 300,000 vacunados…
En eso está, cuando le informan que ya se acabó la promoción de vacunas regaladas. ¡Ya no hay… no hay!
Séptimo acto: El presidente de México, haciendo gala de su gran habilidad para desenredar entuertos con atole, dice que la ONU exigió la entrega de vacunas a los países más pobres y que México cedió las suyas a aquellos infelices…
En versión oficial, el presidente de la ONU y el representante de Pfizer, tuvieron que salir en New York, a desmentir semejante jarro de atole…
Octavo acto: – ¡Pero ya hemos avanzado con otros acuerdos, con otros laboratorios! ¿Cuál es la prisa? clama el presidente…
La ONU sigue publicando que México es el único que no ha comprado vacunas…
Último acto: El presidente dice estar enfermo, con síntomas leves… cuando ya fue vacunado según esto, en octubre…
¿Cómo se llamó la obra?
a)»¿Y LOS $120,000’000,000 APÁ?»
b) «La estafa maestra»…
c) «El miedo no anda en burro»…
Tomado del muro de Luis Javier Jiménez Manzo
NOS LEEMOS MAÑANA…