
Por Carolina Salomón
La vida del ciclista Fidel Gutiérrez Fuentes cambió de un día para otro, después de padecer dengue y neumonía le amputaron la pierna izquierda que lo llevó a caer en una depresión porque ya no podía valerse por sí mismo y no volvería a pedalear más su bicicleta.
El hombre de 67 años de edad solía rodar en su bici por diferentes municipios, desafortunadamente a finales del año pasado comenzó con problemas de mala circulación en el pie izquierdo y en enero le cortaron la pierna.
Aydee Gutiérrez, sufría por ver triste a su papá y pidió a un grupo de ciclistas que lo visitaran para que lo alentaran a seguir adelante.
Don Fidel volvió a usar su playera, su casco, sus guantes y tuvo la oportunidad de convivir con los deportistas con quienes cada jueves recorría las calles de Monclova.
Harold, un niño del grupo le hizo un cartel con el mensaje: “Sé fuerte porque las cosas muy pronto van a mejorar Fidel”.
Hoy sigue en tratamiento para superar la depresión y ha mantenido pláticas con el conferencista Emanuel de Hoyos, quien lo ha animado porque él perdió una pierna y no fue obstáculo para practicar deporte.
La joven señaló que su deseo es que su padre un día pueda tener una prótesis para que vuelva a rehacer su vida.
“El año pasado se mantenía activo en el deporte y salía en la bicicleta, plantaba árboles en el rancho, pero empezó a caer en depresión cuando le amputan la pierna y para la familia era doloroso verlo en cama”, dijo.
Recordó que su padre tuvo dengue en noviembre, luego se complicó su salud con una neumonía por la cual tuvo que estar hospitalizado 15 días y conectado a un tanque de oxígeno.
Al ser dado de alta continuó con el tratamiento en casa, pero al notarle que parte de sus dedos del pie izquierdo se le empezaban a obscurecer, decidieron practicarle unos estudios que arrojaron que traía una arteria tapada.
Necesitaba una operación urgente y fue sometido el 24 de diciembre, pero después le tuvieron que amputar la pierna porque no le circulaba la sangre.