
Por Fabiola Sánchez
A sus 52 años de edad, la señora Silvia Rivera se gana el pan de cada día junto a su esposo Héctor Javier Morales, haciendo trabajos de albañilería por toda la región.
“Quién dijo que las mujeres no podíamos, querer es poder”, así lo expresó la señora Silvia, quien sin molestia alguna carga los bultos de cemento para ayudar en las obras de albañilería que tiene en contrato junto a su esposo.
Fue hace dos años que el señor Héctor Morales, habitante de la colonia Villa del Desierto de la ciudad de Frontera, en su domicilio realizaba el trabajo de mecánica lo cual pedía el apoyo de su esposa para acercar lo necesario y poco a poco le fue enseñando nombre de herramientas y la función de estas.
Posterior a esto se le solicitó a Héctor realizar un trabajo de demolición y construcción de una vivienda en el municipio de Nadadores, contrato que aceptó e invito a su esposa para que lo acompañara, y fue ahí donde inició la experiencia de albañil de la señora Silvia.
Ama de casa, madre de familia de dos mujeres y un hombre, dejó las labores de su hogar para emprender una experiencia que pocas mujeres se atreven a realizar, decidida a efectuar un trabajo que por muchos años fue encomendado para personas del sexo masculino.
La mujer albañil nos narró que cuando realizaba sus labores domésticas frecuentemente sentía molestias musculares e incluso su estado de salud ante especialistas era de cuidado, sin embargo, desde que inició desempeñándose como ayudante de albañil todas las dolencias desaparecieron.
“Hoy puedo cargar bultos de cemento, estar agachada por un largo tiempo colocando piso o estar en el sol haciendo mezcla de cemento, y cuando llego a casa a descansar sigo con las labores que me corresponden, pero no me duele nada”, orgullosamente lo dijo Silvia.
Con camisa de cuadros, pantalón de mezclilla y cachucha, completamente cubiertas de arena es como se puede observar a la señora Silvia en la remodelación de un edificio de la zona centro de Monclova, quien trabaja junto a su esposo y dos compañeros más.
Expresó que en esta remodelación que actualmente labora, ella ha colaborado en la colocación de vitro piso y enjarre de las paredes, siendo esto para ella ya un trabajo sencillo, pues los anteriores realizados le han dejado la experiencia para realizar de manera profesional sus encomiendas.
Dio a conocer que una vez que se concluya dicho trabajo, ya tiene contemplado un nuevo proyecto en el cual en equipo con su esposo trabajarán en la ciudad de San Buenaventura, en una obra de la alameda.