
El regreso de la afición al Estadio Jalisco en el Preolímpico ha tenido un punto oscuro. Y es el grito homofóbico que la FIFA ya investiga para aplicar una posible sanción.
Pese a que durante más de 10 años, desde que la manifestación surgió en el Preolímpico de Guadalajara en 2004 y la gente se divirtió en su momento, hoy hay otra generación que ha comprendido que es una expresión discriminatoria y pide poner fin a la historia.
Santiago Randolph, quien viene desde Aguascalientes a presenciar el juego México contra Canadá, asegura que el grito caducó.
“La gente tiene que entender, es la realidad, estamos hartos, este grito ya pasó de moda, la FIFA nos está sancionando y ojalá que la gente entienda porque nos pueden meter un susto, y podemos quedar fuera de un Mundial”, dijo el aficionado.
Randolph quiere seguir viendo a México en las grandes competencias.
“Es mi primer partido en el Preolímpico, pero ya tengo 5 años viniendo a partidos de la Selección, y ojalá que Dios nos preste vida para seguir viendo a México. A mí me apasiona viajar y el futbol, así que es una combinación excelente”, comentó.