“No me voy a ir de la Presidencia Municipal hasta no traerles agua potable”, aseguró el candidato del PRI a la alcaldía de Ramos Arizpe, Chema Morales Padilla, a los habitantes del ejido Nuevo Yucatán.
En su primer día de campaña proselitista, el aspirante a la reelegirse como alcalde se trasladó hasta las comunidades rurales más alejadas para presentar sus propuestas.
Ante las 24 familias que conforman esta población localizada a más de 160 kilómetros de la cabecera municipal, el priista se comprometió a dotar de una fuente de abasto de agua potable propia al ser los únicos en recibir el vital líquido mediante pipas cada 15 días.
“Voy a perforar (un pozo de agua potable) y, si no encuentro, me la traigo de otro lado, pero tengan la seguridad de que vamos a tener agua desde donde nos la tengamos que traer porque no es posible que Nuevo Yucatán sea la única comunidad que no tiene agua potable en Ramos Arizpe. No puede dormir tranquilo un gobernante sabiendo que hay niños, niñas y familias que todos los días padecen por la falta de agua potable”.
El candidato pidió a las decenas de familias que viven en Nuevo Yucatán su respaldo para continuar al frente de la administración municipal y mantener programas y acciones sociales de beneficio para su desarrollo.
“Ustedes ya me conocen y saben que jalamos con hechos. Me da gusto que es una comunidad en donde todos tienen paneles solares, tienen energía para prender luminarias y todas las familias tienen un refrigerador, esos son actos de justicia social, para eso estamos participando por primera vez en la historia en este modelo de reelección”, dijo el aspirante tricolor.