En una audiencia celebrada esta tarde, Ismael Zambada Imperial, Mayito Gordo, hijo de Ismael El Mayo Zambada, se declaró culpable ante el juez Dana Sabraw, de la Corte Federal del distrito sur de California. Su sentencia será dada a conocer en la primavera del 2022.
Zambada Imperial fue extraditado en diciembre del 2019 a California bajo una acusación de dos cargos por importar y distribuir metanfetamina, cocaína y mariguana a Estados Unidos.
Aunque hoy aceptó las acusaciones, en su primera audiencia, tres días después de ser extraditado, se declaró inocente de los dos cargos que lo pueden hacer acreedor a una pena mínima de 10 años y una máxima de cadena perpetua.
Capturado en Culiacán en noviembre del 2014 por miembros de la Secretaría de Marina, actualmente se encuentra recluido en el Centro de Detención Metropolitano de San Diego.
La acusación señala que Mayito Gordo o El Buen Chico conspiró para transportar la droga y luego lavar y transferir las ganancias hacia México “en beneficio de los miembros del cartel de Sinaloa y asociados”.
En la misma acusación aparecen tanto Ismael Zambada Sicairos, Mayito Flaco, e Iván Archibaldo Guzmán Salazar, el hijo de El Chapo Guzmán, ambos prófugos de la justicia en ambos países.
Conocido por ostentar en redes sociales su vida como narcojunior, Zambada Imperial es el tercer hijo del Mayo Zambada que enfrenta un proceso en los Estados Unidos. El primero fue Vicente Zambada Niebla, detenido en México en el 2009 y extraditado un año después a Illinois donde se halla su acusación.
El Vicentillo fue sentenciado en mayo del 2019 a 15 años de cárcel que se cumplirán en el 2024, aunque versiones de la cadena Univision aseguran que ya no se encuentra bajo la custodia del sistema de prisiones de los Estados Unidos, por lo que probablemente ya se encuentre en libertad.
Le siguió Serafín Sera Zambada Ortiz, detenido en noviembre del 2013 cuando intentaba cruzar a píe a por la frontera norte de México, en el puente internacional de Nogales. Serafín fue condenado a cinco años y medio de cárcel y el 11 de septiembre del 2018 salió de la prisión para regresar a México. En su acusación sólo existía un cargo de conspiración para importar metanfetamina y cocaína.
Con la declaratoria de culpabilidad del Mayito Gordo –cuyas audiencias se pospusieron en 2020 debido a la pandemia de covid-19 en California– ahora resta conocer los años que determinará el juez Sabraw.
Los cinco años que condenaron al Sera por un cargo similar al suyo, más los siete que ya lleva preso, ofrecen a Ismael Zambada Imperial la esperanza de que, a sus 36 años, no permanecerá mucho tiempo más en una cárcel estadunidense.