
Con una baja afluencia de visitantes, y un limitado número de floristas, inició la celebración del Día de las Madres en los panteones de Ramos Arizpe.
Los camposantos de San Nicolás de Tolentino y San Ignacio fueron abiertos al público desde las 8 de la mañana para facilitar la llegada de quienes laboran este 10 de mayo, o quienes buscan evitar las concentraciones masivas.
Contrario al escenario previsto, fueron pocos los ciudadanos que llegaron a depositar flores a las madres difuntas; se espera que para hoy haya un repunte en la asistencia.
“Se consideró que por ser domingo las familias vendrían desde hoy, mucha gente trabaja en lunes y ya no se puede mover con facilidad, pero llevamos unas cien personas contabilizadas. La gente está cumpliendo con los protocolos, y esto nos ha permitido que no haya aglomeraciones”, comentó Raúl Aguirre, uno de los Vigilantes de la Salud asignado a la toma de temperatura y colocación de gel antibacterial.
Apenas cinco floristas estaban colocados a las afueras de San Nicolás de Tolentino, por lo que la mayor parte de la calle David Martínez Soto permanecía vacía.
“Estamos aquí desde el sábado y todo esta muy flojo. De verdad esperamos que ya el lunes haya más gente, sino va a ser mucha la pérdida”, comentó Israel González uno de los vendedores colocados en este panteón.
En el caso de los floristas los arreglos van desde los 150 a los 300 pesos.
Por el momento se desconoce si habrá vendedores de comida o algún otro artículo que vaya a instalarse en torno a los camposantos.