Por Esequiel Aguilera
Los 21 suicidios registrados en la región en lo que va del año, preocupa a la iglesia que diseñará programas de acompañamiento a la juventud, pero también se necesita que los padres platiquen con ellos y estén al pendiente del desarrollo de sus vidas, dijo el padre José López Sandoval.
“Es urgente atender este tema, la juventud necesita acompañamiento, el dejar de acudir a la escuela transformó sus vidas, viven de noche y duermen de día, los padres no se dan cuenta porque ante las condiciones actuales ambos trabajan, las redes sociales los van atrapando y eso ocasiona que se pierdan en el camino” apuntó.
Dijo que por parte de la iglesia se manejarán estrategias para ayudar a la juventud, una de ellas será la pastoral juvenil, que los muchachos retomen el camino, que sientan se sientan acompañados, incluso de ser necesario también se les brindara atención sicológica y espiritual, para cambiar sus vidas.
Insistió que los padres de familia tienen que hacer lo suyo, lo anterior por ser diversos los factores que orillan a las personas al suicidio, si en la familia se fomenta el diálogo, el acompañamiento a los muchachos y se observa el entorno social donde se desarrollan, será posible enseñarlos a vivir de otra manera.
“Si es preocupante lo que está ocurriendo en la región, los suicidios obligan a reflexionar, a entender que algo anda mal, sobre todo por el encierro en que se encuentran desde hace más de un año, les hace falta ir a la escuela, convivir con sus compañeros socializar y ser escuchados” apuntó.
El presbítero, destacó que la iglesia mediante la Pastoral Juvenil y apoyo sicológico atenderá este serio problema, pero insistió que también los padres de familia tienen mucho que aportar, colaborar en el programa que se pondrá a disposición de la juventud y cambiar de manera positiva su pensamiento, enfatizó.