“Se puede engañar a la autoridad, pero no se puede engañar al virus», expresó el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, al anunciar 5 puntos para contener el crecimiento de casos de contagio de COVID-19 en la entidad.
Las medidas
Primera: la supervisión de horarios y aforos será estricta y apegada al semáforo.
Segunda: eventos como competencias, ferias, expos, congresos, exhibiciones tendrán que generarse en el contexto de burbuja sanitaria en el que se debe respetar el aforo. Todo el que ingrese deberá mostrar una prueba de antígeno negativa, de antigüedad no mayor a 48 horas y una vez que ingrese a la burbuja, no podrá salir hasta que el evento concluya.
Tercera: habrá cierres de calles y se restringirá la movilidad en las principales avenidas. Se sugiere estar atentos a los mensajes oficiales.
Cuarta: el transporte público y privado será revisado para que se respete el número de pasajeros en semáforo naranja.
Quinta: las reuniones masivas serán sancionadas.
Un momento clave
Carlos Joaquín aseguró se está en un momento crucial en el que cualquier acción, por pequeña que parezca, ayudará a frenar el número de contagios y evitar regresar a semáforo rojo.
Respecto a la primera medida, de los aforos, sostuvo que de incumplirse, habrá cierres, suspensiones y clausuras.
“No podemos arriesgarnos a convivencias que incumplen las medidas de sana distancia y ponen en riesgo a toda la población por el esparcimiento de unos cuantos”, aseguró.
Del 17 al 23 de mayo Quintana Roo continuará en semáforo naranja. Las autoridades sanitarias han manifestado su preocupación por volver a confinamiento ante el aumento de contagios de COVID-19 durante cinco semanas seguidas.