
Menos de dos hectáreas de pastizal fueron consumidas por el incendio en la Sierra de San Antonio de las Alazanas, gracias a la rápida acción de los brigadistas del municipio de Arteaga, quienes lograron cercar las llamas evitando que estas se expandieran y pudieran afectar más de la vegetación del Pueblo Mágico.
El clima fue un gran aliado de los apagafuegos, pues la presencia de lluvia y humedad en algunas zonas del sureste, fueron las indicadas para que el siniestro no se propagara a mayor velocidad, como sucedió con el incendio de “La Pinalosa”.
Tras una labor de casi tres días, este miércoles se logró un control total del incendio, así como también una sofocación del cien por ciento del incendio, indicando que se mantendrán las brigadas para vigilar únicamente el comportamiento de los trabajos realizados.