Un grupo de 14 trabajadores de la mina, que el pasado sábado se inundó y atrapó a siete de sus compañeros, denunciaron a través de un grupo de mujeres del ejido Rancherías, que Gerardo Nájera, dueño de la mina, “no les ha pagado el sueldo de su semana ya laborada”.
El empresario carbonero, les da como pretexto que por la emergencia que están pasando con el accidente hasta el lunes les pagaría, por lo que señalan es un total de abuso, porque aparte del dolor por la pérdida de sus compañeros y de que ellos están como voluntarios trabajando en le rescate, “no han podido llevar el sustento diario a sus familias”.
Magdalena Lozano y sus hermanas, a nombre de los mineros, hicieron la denuncia pública de este nuevo abuso, que el dueño de la mina del ejido Rancherías esta cometiendo, al no pagar el sueldo a los modestos mineros que en estos momentos están siendo afectados por la desgracia.
“Y aparte sin dinero, diciéndoles que hasta el lunes y no entienden que los niños nada saben de eso, ellos solo piden de comer y sin el sueldo de lo que ya trabajaron es un verdadero abuso de parte de los dueños, que hasta este domingo no les pagaron su semana trabajada, y ellos sin poder resolver por que anda en la mina trabajando en el rescate de sus compañeros”.
Señalaron que después del mes de octubre que supuestamente la mina fue supervisada, las autoridades Federales sabían del riesgo de muerte bajo el cual trabajaban los cerca de 20 mineros, muchos de ellos jóvenes de veinte años.
Dijo que es totalmente injusto lo que el dueño de la mina sigue cometiendo en contra de los modestos trabajadores, “es una compañía que no les puede decir que no hay dinero, ya que el accidente nada tienen que ver con lo administrativo y su sueldo de la semana ya lo trabajaron y se los debe de pagar, es algo que ya es de ellos” dijo la empresaria Magda Lozano, habitante del ejido Rancherías en el Municipio de Múzquiz.
Señaló que ella y sus hermanos hicieron la denuncia pública a nombre de los mineros, porque ellos andan directamente en el rescate y no podían salir a hacerlo personalmente.