Luego de las elecciones intermedias y la llegada de Rogelio Ramírez de la O a la Secretaría de Hacienda, se prevé un endurecimiento de impuestos existentes, recrudecimiento de fiscalización e incluso nuevos impuestos, según la consultora Thompson & Knight.
Las necesidades de recaudación del Gobierno son muy grandes para continuar con los proyectos insignia como el Tren Maya y garantizar los distintos programas de transferencias sociales, por lo que se verán forzados a recaudar más, afirmó Mario Barrera, socio de impuestos en Thompson & Knight.
En primer lugar, no se descarta la creación de nuevos impuestos como aquel sobre las herencias, grandes fortunas o el cannabis, dijo.
Si bien se ha mencionado que no se crearán nuevos impuestos, ya se estableció el gravamen al comercio digital, donde se dijo que era tan sólo la aplicación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) ya existente sobre el comercio electrónico.
“Si se estableciera un impuesto a las herencias sería de ISR. En estricto sentido no se trataría de un nuevo impuesto sino de una nueva actividad gravable; un impuesto a las grandes fortunas también podría caer dentro del ámbito del ISR”, afirmó.
Otra estrategia que la Secretaría de Hacienda y el Servicio de Administración Tributaria (SAT) realizarán será endurecer impuestos ya existentes, anticipó Barrera.
El compromiso es no alzar las tasas, indicó, pero se puede lograr mayor recaudación ampliando los conceptos de ingresos acumulables y eliminando deducciones.
Asimismo, se espera un endurecimiento de las medidas de fiscalización, a través de más cartas invitación de restricción de sellos digitales y más auditorías.
“Son medidas que están enteramente bajo el Poder Ejecutivo y se puede ver robustecido por los éxitos que ha tenido en someter a grandes empresas como Walmart y otros”, refirió.
Otro factor que apoyará la mayor recaudación será la limitación de las atribuciones de la Procuraduría para la Defensa de los Contribuyentes (Prodecon), comentó Catalina Mandujano, socia de legal de impuestos de Thompson & Knight.
“Hemos visto que a la Prodecon se le limitó vía presupuesto. Se limitó la figura del acuerdo conclusivo, se puso figuras de improcedencia, se redujo el tiempo para acudir a la Prodecon de seis meses a 20 días durante una investigación”, dijo.
Sobre la reforma fiscal, aseguró que el Gobierno tendrá que tener cuidado con sus propuestas para no generar un descontento social.
“Las reformas fiscales funcionan siempre y cuando los ciudadanos vean beneficios en salud, educación, seguridad, pero actualmente eso no se ve en México, por lo que tiene riesgos de conflictos sociales”, dijo la fiscalista.
