
El Párroco de la iglesia de Santa Rosa de Lima señala que la extracción de carbón es uno de los trabajos más peligros, “pero desafortunadamente el único que crea más fuentes de empleo para las familias que habitan en los Minerales de Múzquiz”.
“Sin bien es cierto, que son mal pagados, los jóvenes que a temprana edad se convierten en padres de familia, no tienen mucho de donde escoger y al tener ya una responsabilidad de ser el sustento de una familia, pues terminan trabajando en las minas bajo condiciones inhumanas”.
El Padre Juan Alberto García, durante el sermón dominical, invitó a las familias a mantener la esperanza y fidelidad, “el trabajo dignifica y estos hombres dan testimonio de ello, pues murieron en sus labores”.
Señaló que es importante ofrecer el duelo por el eterno descanso de estos siete mineros fallecidos, al igual que muchos otros en la región, que dan testimonio que el trabajo dignifica; “fallecieron cumpliendo con su deber y agradecidos porque el producto que se saca de la tierra para muchos es beneficio que podemos gozar de los recursos que la naturaleza nos da, y el mensaje que nosotros les damos es claro: esperanza con fidelidad”.
Detalló que es importante lo que las familias hacen al buscar la justicia, pero que a ellos como iglesia les queda “solo apoyar en lo que les corresponde, fomentar el que se mantengan siempre en unidad, en la esperanza y ayudar a las familias de los mineros a que tengan ese contacto espiritual, para ayudarles a salir de la depresión y lo que implica el dolor de haber perdido a sus seres queridos en este desafortunado y trágico accidente”, dijo el líder religioso.