
Un inmigrante de origen hondureño, se llevó el susto de su vida luego de ser mordido por una víbora de cascabel cuando caminaba por la zona montosa en la localidad de Nueva Rosita; de forma inmediata solicitó ayuda y fue trasladado al Centro de Salud donde le brindaron atención médica y le salvaron la vida, aunque su estado es delicado.
Daniel “N”, es el inmigrante de origen hondureño, que vio truncado su sueño americano luego ser mordido por la víbora de cascabel, esto cuando se escondía de las autoridades para evitar ser deportado a su país.
El centroamericano comentó que atravesar este país en un largo viaje para buscar el sueño americano termino mal, pues sorpresivamente se vio interrumpido por la mordedura de la serpiente.
El afectado recibió atención médica, después recibió ayuda de un amigo quien lo trajo a esta localidad donde se recupera del letal veneno de la serpiente en el Hospital General Centro de Salud de Nueva Rosita.
El ataque de la serpiente fue hace tres días y señaló que libró la muerte, pero segundos después de recibir la mordida describió un dolor muy intenso y caliente en la zona afectada que pensó en la muerte o amputación de la extremidad.
Agradeció a Dios de estar con vida y de que hubo personas cerca en ese momento que pudieron auxiliarlo porque fueron momentos de mucha angustia y pánico porque el veneno de la serpiente es mortal.
“Suena absurdo, pero ni en mi país sufrí un ataque de la imponente Anaconda y en México una cascabel casi estuvo a punto de arrebatarme la vida” finalizó el centroamericano Daniel.