Un tribunal federal rechazó ayer desbloquear las cuentas bancarias de Emilio Zebadúa, el ex Oficial Mayor de la Sedesol y la Sedatu que es considerado como el presunto «cerebro» de la ingeniería financiera de la Estafa Maestra.
El Vigésimo Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa en esta Capital negó en definitiva al ex funcionario el amparo contra el congelamiento de sus activos, dictado desde el 2019 por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
«La Justicia de la Unión no ampara ni protege a Emilio Zebadúa González, en contra del artículo 115 de la Ley de Instituciones de Crédito y sus actos de aplicación consistentes en el Acuerdo 164/2019 de 1 de agosto de 2019 y el oficio 110/F/B/3286/2019 con folio SIARA UIF/2019/000506 del mismo mes y año», señala el fallo.
El colegiado consideró que este bloqueo cumple con la jurisprudencia fijada en 2019 por la Suprema Corte de Justicia, que permite los bloqueos de la UIF cuando existe una solicitud expresa de alguna autoridad extranjera, en el marco de la cooperación internacional.
«El oficio signado por el Agregado Jurídico de la Embajada de Estados Unidos se estima suficiente para demostrar que se actualiza el supuesto de excepción previsto en la jurisprudencia 2a./J. 46/2018, ya que el bloqueo de cuentas se impuso para cumplir con el deber de cooperación contenido en los instrumentos internacionales», señala el tribunal.
La UIF informó que esta resolución demuestra que el congelamiento de activos de Zebadúa fue impuesto en cumplimiento a los tratados internacionales y como una medida de prevención al delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Zebadúa empezó desde el año pasado una negociación con la Fiscalía General de la República para obtener un criterio de oportunidad; es decir, el beneficio de colaborar con información a cambio de la inmunidad penal.
Como parte de esa negociación, ya ofreció un primer testimonio en el que involucra a secretarios de Estado y funcionarios en el esquema de desvíos conocido como la Estafa Maestra, mediante el que se simularon contratos a través de universidades públicas.
El ex colaborador de Rosario Robles se encuentra a la fecha en libertad y la FGR nunca lo ha podido imputar penalmente ni solicitar órdenes de aprehensión en su contra en virtud de que ha obtenido suspensiones contra la judicialización de las investigaciones en su contra.