Por Fabiola Sánchez
El aislamiento en los menores de edad y el excesivo uso de la tecnología, además de dejar una afectación psicológica provocará una difícil readaptación en las clases presenciales que posiblemente se puedan reactivar el próximo ciclo escolar, dio a conocer una especialista en psicología.
Lucia Cipactli López Valdez, Psicóloga del DIF Municipal reconoció que el tema de aislamiento en casa para los menores, más que ser un atadura, fue para ellos vivir en una zona de confort, debido a que todas las actividades que ellos realizaban en la escuela o al aire libre, pasaron a ser rutinas electrónicas.
Señaló que la modalidad de estudio que implementó la Secretaria de Educación Pública, fue para muchas familias algo imposible realizar y algunas otras no impusieron reglas de horarios de estudios, dando a los menores la libertad de realizar otras actividades en los mismos aparatos electrónicos que utilizaban para las encomiendas educativas.
“El no imponer reglas y horarios en las rutinas educativas, eso permitió a los estuantes una rápida adaptación para estudiar a distancia, sin embargo el problema será adaptarse nuevamente a las clases presenciales”.
Mencionó que es importante que los padres de familia previamente inicien rutinas y establezcan horarios similares a los de clase, para preparar a los estudiantes en la rutina que desempeñaran en las clases presenciales, las cuales posiblemente se inicien en el próximo ciclo escolar.
Argumentó que de no ser así existirá un problema de readaptación y aceptación a la realidad y esto orille a los menores a perder el interés por continuar sus estudios o llevará a una conducta de rebeldía hacia los docentes o e incluso hacia los mismos padres.
“Para que los niños estés preparados psicológicamente para el regreso a clases presenciales, padres de familia deben de iniciar a poner reglas y rutinas que asimilen que todo volverá a la normalidad”, así finalizó la especialista.