El grupo parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados solicitó a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión abogar por los migrantes presuntamente torturados y maltratados por personal del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Guardia Nacional, el pasado 15 de junio en la estación migratoria Siglo XXI (EMSXXI), ubicada en Tapachula, Chiapas.
Específicamente, solicitó que exhorten a la Fiscalía General de la República (FGR), la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), al Poder Judicial, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) y a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), para que cada organismo actúe en este caso según correspondan sus facultades legales.
Solicitaron que la Permanente pida la FGR investigar los presuntos actos de tortura, tratos crueles e inhumanos. Mientras que la CNDH debería investigar para que, en el ámbito de su competencia, emita las recomendaciones pertinentes y dé vista al Ministerio Público y éste actúe en el ámbito penal.
Asimismo, propuesieron que la Comisión Permanente debería exhortar al juez Cuarto de Distrito del Vigésimo Circuito con residencia en Tapachula, a que resuelva la solicitud de amparo del Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova (CDHFMC) a favor de los migrantes.
La Comar, en tanto, deberá pedir que resuelva las solicitudes de protección internacional de los presuntos torturados y maltratados, mientras que a la SRE instará a revisar los casos de los migrantes que hayan sido repatriados, para que se les reponga el procedimiento y se les considere como víctimas para reparar el daño.
La bancada del partido del Sol Azteca narró que, con base en información del Servicio Jesuita de Refugiados y el CDHFMC, el 15 de junio fueron sometidos a tortura y malos tratos varios migrantes, así como solicitantes de protección internacional detenidos en la EMSXXI.
En este sentido, protestaron por la falta de claridad en sus procesos migratorios y en sus solicitudes de asilo, así como por recibir comida en mal estado, lo cual les habría enfermado y, en represalia, integrantes de la Guardia Nacional dispersaron violentamente la protesta, sacaron a los cerca de 500 hombres al patio, mientras llovía, los acostaron boca arriba y los golpearon.
De acuerdo con la documentación del CDHFMC, los reprimidos enfermaron de las vías respiratorias, al ser obligados a permanecer bajo la lluvia, y se les negó la atención médica, alimentos en buen estado, las condiciones de higiene y hasta llamadas telefónicas.
Ante esto, el CDHFMC solicitó al juez Cuarto de Distrito amparar a los migrantes para que se les deje de torturar, maltratar, y presentó una queja ante la CNDH, a fin de que también investigue el caso.