Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el país reforzará la seguridad en su Embajada en Haití luego del asesinato del Mandatario de ese país la semana pasada, pero que enviar tropas estadounidenses para estabilizar el país «no estaba en la agenda ».
El Gobierno interino de Haití pidió la semana pasada a Estados Unidos y las Naciones Unidas que desplegaran tropas para proteger la infraestructura clave tras el asesinato del presidente Jovenel Moise. Biden señaló que no estaba abierto a la solicitud, que se produce cuando está reduciendo las fuerzas estadounidenses en Afganistán este verano.
«Solo estamos enviando marines estadounidenses a nuestra embajada», dijo Biden. «La idea de enviar fuerzas estadounidenses a Haití no está en la agenda», agregó.
Mathias Pierre, Ministro de elecciones de Haití, defendió la solicitud del gobierno de asistencia militar y dijo en una entrevista el sábado con The Associated Press que la fuerza policial local es débil y carece de recursos.
La solicitud de intervención de Estados Unidos recordó el tumulto que siguió al último asesinato presidencial de Haití, en 1915, cuando una turba enfurecida arrastró al Presidente Vilbrun Guillaume Sam fuera de la embajada francesa y lo golpeó hasta matarlo.
En respuesta, el Presidente Woodrow Wilson envió marines a Haití, justificando una ocupación militar estadounidense-que duró casi dos décadas-como una forma de evitar la anarquía.
Biden abordó la situación en Haití durante una conferencia de prensa conjunta en la Casa Blanca con la canciller alemana, Angela Merkel.