Habitantes del ejido Reata demandaron la intervención de las autoridades municipales ante la escasez de agua que les afecta desde hace 15 días.
María Guadalupe García Salazar explicó que se presentaron fallas en los paneles solares con los que funciona el pozo de abastecimiento, de ahí que la extracción quedó suspendida.
“Tenemos ya dos semanas batallando, hemos hablado, algunas personas nos han hecho el favor de ir a reportarlo en Presidencia, pero ahorita nadie ha venido. Teníamos poquita agua todavía almacenada, pero ya no sabemos cómo le vamos a hacer”, comentó la afectada.
Urgió a las autoridades para atender la problemática que afecta a decenas de familias de esta población localizada a más de 150 kilómetros de la cabecera municipal.
Hipólito Leija Llamas, gestor social, dijo que intervino en la situación al conocer a varias de las familias de dicho ejido, y acudió a pedir el apoyo de la Secretaría de Desarrollo Rural sin obtener una respuesta clara.
“Como ahorita ya están en guardias no supieron arreglarme nada, el problema es que la gente requiere del agua y no está para esperar a que los burócratas vuelvan de sus vacaciones”.
Se insistió en la necesidad de resolver pronto la falta del vital líquido ante el aumento en las temperaturas.