La Iniciativa Mérida, un plan de seguridad que ha incluido 3 mil millones de dólares de Estados Unidos por más de una década, está muerta, aseguró el canciller mexicano Marcelo Ebrard.
En una entrevista con el diario The Washington Post, el Secretario de Relaciones Exteriores señaló que el plan lanzado en 2007 durante la Administración de George W. Bush no ha dado buenos resultados, por lo que el Gobierno mexicano busca una nueva estrategia con Estados Unidos, pues «estamos en otra era».
«La iniciativa Mérida está muerta. No funciona», dijo Ebrard al medio estadounidense. «No hemos reducido el tráfico o el abuso de drogas. Entonces tenemos que hacer algo más».
En lo que han sido sus primeros comentarios sobre el tema, Ebrard dijo que el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador está en pláticas con el de su homólogo estadounidense Joe Biden para combatir la violencia de los cárteles con un nuevo enfoque basado más en reducir los homicidios que en capturar a los capos de la droga.
El Canciller detalló al Post que México también quiere que el plan incluya más esfuerzos para incautar los materiales usados para fabricar el fentanilo y otras drogas y reducir el tráfico de armas desde el país del norte al sur.
Según un funcionario del Departamento de Estado que habló al Washington Post bajo condición de anonimato, Estados Unidos ha propuesto realizar una reunión de alto nivel con las autoridades mexicanas para avanzar en el tema.
Bajo la Iniciativa Mérida, que fue implementada en el Gobierno del Presidente mexicano Felipe Calderón, el País obtuvo recursos para equipamento de las fuerzas de seguridad, incluyendo aeronaves, así como entrenamiento y ayuda técnica para las policías y el sistema judicial.
Pese a ello, en México hay 36 mil homicidios al año, o 29 por cada 100 mil habitantes, citó el Post.
Ebrard también dijo que la nueva estrategia buscaría proporcionar a México entrenamiento especial y equipo forense para rastrear los homicidios hasta conseguir las condenas correspondientes.