
La ampliación del paro técnico en General Motors mantiene en incertidumbre a la proveeduría local ya que, incluso, se advierte el riesgo de despidos de prolongarse este tipo de medidas, reconoció el presidente de la Asociación de Industriales y Empresarios de Ramos Arizpe (AIERA), Mario Ricardo Hernández Saro.
“Toda la proveeduría se está viendo afectada, algunas ya con paros como consecuencia de los paros en GM; otras siguen produciendo inventario para otras armadoras lo que les da la ventaja de no parar al cien por ciento, pero sí se resiente afectación para la economía regional”.
De acuerdo con el empresario la mayor preocupación radica en que no hay claridad sobre la solución a la escasez de semiconductores, que es el factor que ha obligado a la armadora a ajustar sus líneas de producción.
“Ahorita no tenemos reportes de que se pueda incurrir en despidos todavía, pero de mantenerse (los paros técnicos) no habría que descartarlo. Y lo preocupante es que parece no tener solución pronto, no se manejan fechas de arranque por parte de los suministradores de los semiconductores”.
Insistió en que no hay un panorama claro, por lo que entre los fabricantes de autopartes existe inquietud sobre el desarrollo de su actividad productiva en los siguientes meses y el impacto que habrá por esta continua detención de labores por parte de su principal cliente.
“Y de mantenerse así se afectaría muchísimo a la industria automotriz local”, enfatizó Hernández Saro.
A partir del próximo 02 de agosto inicia una nueva fase de paros técnicos en las plantas Ensamble y Motores del complejo de General Motors en Ramos Arizpe dada la falta de semiconductores para la fabricación de las unidades.