
Con el tope de precios en la venta al público del gas LP, que limita el margen económico de las empresas distribuidoras, es posible que los empresarios eviten nuevas inversiones o tengan que desinvertir para poder continuar con sus operaciones.
“La desinversión se va a dar como una consecuencia natural de que el precio no considera los recursos suficientes para invertir, no considera los recursos suficientes para reponer el equipo de reparto, no considera que tengas servicio al cliente; y en ese sentido va haber una desinversión en equipo, en seguridad, en atención a clientes, pero hay que ser muy claros, no es una decisión del empresario, al contrario.
“Dejar de invertir duele, porque en lugar de ir hacia adelante estás yendo hacia atrás y en vez de mejorar tu servicio lo estás empeorando”, advirtió Carlos Serrano, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas LP (Amexgas).
En cuanto al diálogo con las autoridades, expuso que lo primero que trataron fue el lograr restablecer el abasto de gas, aunque se puede garantizar que ya no haya paros en su venta.
Según Serrano, se está buscando generar condiciones regulatorias que permitan brindar certeza jurídica y económica al sector, necesaria para que las empresas consoliden grandes inversiones.
“La certeza económica, acompañada de un respeto al Estado de Derecho, es decir que se respete la ley, y que nosotros como industria mexicana podamos trabajar en un entorno donde haya más estabilidad, que se elimine el robo de gas a Pemex y que no existan zonas de reparto controladas, nadie lo queremos, pero existe y nos afecta”, puntualizó.
Asimismo, Serrano dijo que las empresas distribuidoras que cuentan con su propio equipo y personal de distribución a los hogares sí cumplen con el registro y normas establecidas por la Comisión Reguladora de Energía (CRE), pero hay comisionistas que no.
“No estamos en contra de ellos (los comisionistas), al contrario, queremos que exista una regulación correcta, completa, suficiente y que se aplique en beneficio de todos, de la competencia, del consumidor final y de hacer respetar las leyes. Es decir, que hay una regularización, no que se les elimine ni se les castigue, que se contemple una regulación y se garantice que no haya pipas o repartidores que no estén registrados o que estén distribuyendo un producto de origen ilícito porque eso no le beneficia a nadie”, apuntó.
“En realidad, la CRE tiene un permiso a comisionistas, sí existe ese permiso, sin embargo, alrededor de los 4 mil comisionistas que existen en la zona metropolitana del Valle de México solamente existen 40 o 50 permisos otorgados”, apuntó.