
Francisco Javier Rodríguez Nieto, de 41 años de edad, quien perdiera la vida la mañana de este viernes al impactar la camioneta que conducía y en la que transportaba a nueve compañeros a su lugar de trabajo, fue uno de los férreos hombres que trabajaron durante más de ocho días para rescatar los cuerpos de los siete mineros que quedaron atrapados en la cueva de carbón de la Empresa Micarán.
Edgar Rodríguez Nieto, hermano de Javier Rodríguez “El Gordo” como cariñosamente le llamaban sus familiares, compañeros y amigos, sin poder contener el llanto por la trágica muerte de su ser querido, en el lugar de los hechos donde espero más de cuatro horas a que el cuerpo de su hermano fuera rescatado del interior de la camioneta que manejaba transportando a sus compañeros sobre la Carretera Estatal 22 Palaú-El Sauz, dijo que su hermano era un hombre dedicado a sus padres, que no tenía hijos y que era soltero.
Con apenas una pocas palabras que lograba emitir, habló un poco sobre que él junto a su hermano participaron como rescatistas voluntarios en la mina Micarán integrando la cuadrilla de rescate de la empresa Rodamientos y Equipos S.A de C.V, pero que él solo fue unos días.
Aseguró que su hermano Javier sí estuvo desde el momento mismo de los hechos el cuatro de junio, en las maniobras de rescate de los siete mineros atrapados, ya que él laboraba en la cueva de carbón aledaña a la que se siniestro, y por eso su cercanía con los compañeros mineros de Micarán.
Trágicamente, ahora fue Javier Rodríguez quien requirió de ser rescatado de entre los fierros retorcidos de la camioneta que conducía, al morir tras impactarse de frente contra la otra unidad de transporte de personal minero, esto al dormitar al volante invadir el carril contrario y tras el impactó volcar la unida por la cinta asfáltica hasta quedar en la orilla de la carretera y su cuerpo junto al de otro compañero que viajaba con él en cabina atrapado en el interior.
La camioneta que conducía Francisco Javier Rodríguez “El Gordo” era una unidad que fue improvisada por su patrón para el transporte de personal, desde hace más de dos años que inicio la explotación de carbón en una cueva del Mineral de Ranchería, la cual no estaba en óptimas condiciones y a diario transportaban en ella mineros que recogían en los diferentes Minerales del Municipio de Múzquiz para llevarlos a su centro de trabajo.
La cuadrilla de rescatistas voluntarios que trabajaron hasta lograr el recate de los cuerpos de siete mineros en la mina Micaran el pasado mes de junio del presente, fue formada por Juan José Lara, Aarón Rodríguez Enrique Sigala, Adrián Sigala, Ernesto franco, Fermín Ríos, Paco Nieto, Héctor Moreno, y Francisco Javier Rodríguez Nieto ((q.e.p.d), que cada día entraron a la mina siniestrada hasta que lograron el objetivo trazado de recuperar a sus compañeros.
En esta ocasión les toco a ellos ya que muchos de esta cuadrilla de rescate viajaban este viernes en la camioneta que los transportaba hacia su lugar de trabajo en el Mineral de Rancherías y que como todos los días era conducida por Javier, quien presuntamente dormitó al volante sobreviniendo el trágico accidente que le arrebató la vida junto con su compañero y amigo Fidencio Jesús Puga Gómez.