‘A unos metros de la frontera con Guatemala, el Gobierno de México abandona a su suerte a migrantes centroamericanos, entre ellos niños y embarazadas, que horas antes fueron deportados vía aérea desde Estados Unidos, confirmó Grupo REFORMA.
Cientos de guatemaltecos, hondureños y salvadoreños han sido expulsados, desde inicios de este mes, en vuelos charter hacia Chiapas y Tabasco, donde son recibidos por el Instituto Nacional de Migración (INM).
En el caso de Chiapas, los vuelos llegan al Aeropuerto de Tapachula, y, custodiados por la Guardia Nacional, el INM traslada a los deportados hasta la zona de Talismán, en el Municipio de Tuxtla Chico, donde finalmente los abandona pidiéndoles que crucen a pie el puente fronterizo hacia Guatemala, sin que autoridades de este país tengan conocimiento.
En un recorrido que realizó Grupo REFORMA el jueves sobre la zona limítrofe, el guatemalteco Pedro Pacay, quien apenas fue deportado anoche desde Mcallen, en Texas (Estados Unidos), con su hijo de 5 años, confirmó el modus operandi de las autoridades.
«Somos de Guatemala los que veníamos, unas 300, 400 personas. En avión nos trajeron, el bus está listo para reportar acá en la frontera con Talismán. Nos entregaron en la frontera, comenzamos a bajar en el bus, la Migración de Guatemala nada, no nos recibieron, sólo nos bajamos y nos cruzamos así nomás, todos nos regamos, cada quien por su lado», dijo en entrevista el originario del Departamento Petén.
Mientras autoridades mexicanas no han informado nada sobre estos operativos, en Guatemala ya han denunciado oficialmente esta expulsión de sus connacionales y migrantes de otros países, sin que se respeten procesos administrativos.
La Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) informó ayer que da seguimiento a la expulsión que realiza México en su frontera de los migrantes que, a su vez, fueron enviados desde Estados Unidos.
«Se ha concretado el uso del territorio guatemalteco como puente para expulsión de personas migrantes sin acceso al debido proceso y mecanismos de protección internacional», publicó.
En tanto, el Instituto Guatemalteco de Migración acusó que las autoridades mexicanas también deportan de manera exprés hacia su país a extranjeros detenidos por agentes migratorios.
Ayer, fueron las agencias de Naciones Unidas quienes revelaron las deportaciones bajo el Título 42, el cual utiliza Estados Unidos para justificar los envíos masivos de personas por la pandemia, con vuelos desde McAllen a Chiapas, y de Brownsville a Tabasco.
Luis García Villagrán, del Centro de Dignificación Humana AC, atestiguó la deportación de centroamericanos a la frontera sur mexicana y consideró el hecho como algo inédito en la historia del País.
«Son deportaciones que nosotros estamos llamando extrajudiciales, sin el debido proceso, sin la oportunidad de solicitar refugio, el trato ha sido pueril a los migrantes», expresó el activista.
Tapachula, con un aproximado de 70 a 120 mil migrantes ya deambulando en la ciudad por su estatus migratorio, podría empeorar su situación sanitaria, de ocupación de asilos y económica por estos envíos, consideraron habitantes.