LES CAYES.- La depresión tropical Grace descargó lluvias torrenciales sobre Haití apenas dos días después de un terremoto que remeció la empobrecida nación caribeña, aumentando la miseria de las miles de personas que perdieron a sus seres queridos, están heridas o se quedaron sin casa, y obligó a los saturados hospitales y rescatistas a actuar con rapidez.
Tras la caída de la noche el lunes, las intensas lluvias y los fuertes vientos azotaron el suroeste del país, la zona más afectada por el sismo del sábado, y las autoridades advirtieron que las precipitaciones podrían arrojar hasta 38 centímetros de agua sobre algunas zonas antes de que la tormenta siguiese su rumbo.
La capital, Puerto Príncipe, también registró fuertes lluvias.
Grace llegó al país el mismo día en que la Agencia de Protección Civil elevó la cifra de fallecidos por el sismo a mil 419 personas y la de heridos a 6 mil, muchos de los cuales han estado esperando a recibir ayuda médica tendidos al aire libre con un calor asfixiante.
Las lluvias y los vientos de Grace elevaron la amenaza de deslaves e inundaciones repentinas durante su lento avance sobre la península de Tiburón, en el suroeste de Haití, durante la noche, antes de encaminarse hacia Jamaica y el sureste de Cuba este martes.
El terremoto que estuvo a punto de arrasar algunas localidades del suroeste es el último desastre que sufre la nación más pobre del hemisferio occidental.