El Congreso de Tabasco, de mayoría morenista, aprobó este miércoles que el Gobernador Adán Augusto López Hernández adquiera en uno o varios créditos bancarios una deuda de hasta mil 500 millones de pesos, la cual tiene un plazo de pago máximo de 20 años.
Con 25 votos a favor y 6 en contra, el Pleno aprobó el dictamen que ayer surgió desde la Comisión Ordinaria de Hacienda y Finanzas, en el cual el Poder Ejecutivo justificó que necesitaba dicha cantidad para el Programa de Inversión Pública Productiva 2021-2022.
«El Poder Ejecutivo del Estado, a través de la Secretaría de Finanzas, podrá contratar el o los financiamientos autorizados en el Presente Decreto en el transcurso de los ejercicios fiscales 2021 y 2022, y deberá pagarlos en su totalidad, en un plazo máximo de hasta 20 (veinte) años contados a partir de la primera disposición, en el entendido que los intereses y demás términos y condiciones, serán los que se establezcan en el contrato o los contratos que al efecto se celebren», se estableció en el artículo 3.
Se aseguró que con dicho monto se solventará la adquisición de equipo médico e instrumental, de laboratorio para la salud, de infraestructura y equipamiento para seguridad pública y readaptación social y de infraestructura hidráulica.
Asimismo, para la construcción, mejoramiento y rehabilitación de bienes de dominio público, incluyendo centros de salud, hospitales y escuelas, así como la administración y procuración de justicia.
De acuerdo con la propuesta del Gobernador Adán Augusto López Hernández, la entidad la situó el Sistema de Alertas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en semáforo verde por un nivel de endeudamiento sostenible en el primer trimestre de 2021.
Sin embargo, la pandemia de Covid-19 paralizó algunas actividades económicas y con ello se generaron afectaciones en la economía local.
«Como un efecto secundario lógico del distanciamiento y la paralización temporal de determinadas actividades económicas se tuvo la desaceleración del sistema productivo y, en consecuencia, la afectación de la economía nacional y local», se argumentó en la propuesta.
En la sesión, el priista Gerald Washington criticó que la propuesta la hizo el Gobernador apenas el pasado 21 de agosto, y el Congreso la ordenó de forma breve y sin ver si era viable para los tabasqueños.
«El hecho de que este Gobierno tenga que recurrir al endeudamiento significa que existe una mala administración de los recursos. Los recortes y medidas de austeridad implementadas han sido una farsa, pues con todo lo supuestamente ahorrado se podrían satisfacer necesidades locales», criticó en tribuna.
«Apenas el 5 de enero, el Gobernador señaló ante los medios de comunicación que se había cerrado el año 2020 con finanzas sanas, también dijo que no era necesario solicitar empréstitos a largo plazo, pues con el presupuesto destinado a Tabasco para el 2021 y las políticas de austeridad de la Administración estatal se podría desarrollar la entidad».
También en contra, Dolores Gutiérrez, del PRD, criticó que tuvieron un año para presupuestar recursos para mejorar infraestructura y otras necesidades que hoy se enlistan para el crédito millonario.
«Pagar mil 500 millones de pesos en 20 años, ya se pusieron a pensar compañeros de Morena y aliados que van a votar a favor, es hipotecar el futuro de los tabasqueños y tabasqueñas que ni siquiera han nacido, es una decisión de Gobierno irresponsable, se llenaron la boca presumiendo finanzas sanas en tres años, se llenaron la boca», reclamó.
A favor del crédito, el diputado independiente, José Manuel Sepulveda del Valle, aseguró que la entidad tiene una deuda heredada por anteriores Administraciones del PRI y PRD.
«Desde hace 12 años hay un hueco de 4 mil millones de pesos, no podemos ser irresponsables y por el simple hecho de que ya nos vamos o cuestiones de partidos políticos dejar a la gente sin su pago, es una irresponsabilidad heredada que se viene arrastrando», expresó.