CIUDAD DE MÉXICO.- Ante las agresiones de personal de migración contra migrantes centroamericanos en Chiapas, cuatro agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) llamaron al gobierno mexicano a respetar los estándares internacionales en el uso de la fuerza.
La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) calificaron de preocupantes los hechos ocurridos el 28 de agosto en Chiapas, dónde agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) golpearon a migrantes, refugiados y solicitantes de asilo – incluyendo niñas y niños –, contrario a los estándares internacionales en la materia, en presencia de elementos de la Guardia Nacional.
Además, expresaron se preocupación por la información recibida por la agencias sobre amenazas que habrían recibido defensores de derechos humanos que están documentando la situación humanitaria y de derechos humanos de las personas migrantes en la mencionada entidad.
Ante esta situación, la ACNUR, la OIM y la ONU-DH pidieron al Instituto Nacional de Migración (INM) y a la Guardia Nacional implementar medidas inmediatas de prevención, de no repetición y rendición de cuentas, y avanzar con la investigación de los casos de violaciones de uso de la fuerza y sancionar a quienes resulten responsables.
Reconocieron la actuación del INM en la suspensión de funciones y la aplicación de medidas para la investigación de funcionarios que estarían involucrados en acciones que implicaron un uso excesivo de la fuerza.
«En toda investigación se deben tomar en cuenta los informes sobre uso de la fuerza, los protocolos de actuación, la cadena de mando y las órdenes operativas bajo las cuales desplegaron a sus elementos, y deben incorporar la perspectiva de género», indicaron.
Asimismo, señalaron que lo ocurrido en Chiapas el pasado fin de semana es una muestra más de la necesidad de fortalecer la capacidad de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) para los procesos de asilo y de establecer alternativas migratorias que garanticen los derechos humanos de las personas migrantes, en línea con el Marco Integral Regional para Protección y Soluciones (MIRPS), el Pacto Mundial para los Refugiados y el Pacto Global para una Migración Segura, Ordenada y Regular del que México es parte.
Las referidas agencias de Naciones Unidas reiteraron su recomendación de garantizar que las prácticas de gestión migratoria, en particular los controles fronterizos, permitan identificar de manera efectiva a las personas que tienen necesidades de protección y brindar acceso a los procedimientos pertinentes para lo cual resulta fundamental ofrecer alternativas de migración regular para personas que no necesitan protección internacional, con el fin de no sobrecargar los sistemas de asilo.
Las agencias agregaron que tienen presente que el marco legal mexicano contempla el respeto irrestricto de los derechos humanos de las personas migrantes, nacionales y extranjeras, sea cual sea su origen, nacionalidad, género, etnia, edad y situación migratoria, con especial atención a grupos vulnerables como niños, niñas, mujeres, indígenas, adolescentes y personas de la tercera edad, así como a víctimas del delito.