CIUDAD DE MÉXICO.- Al señalar que en el periodo neoliberal fue cuando más se robó, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que desde que tomó posesión en 2018, en el caso de los exmandatarios de México, solo si existían expedientes y lo aprobaba la gente en una consulta, «en mi opinión se podía llevar a cabo el juicio contra los expresidentes».
En su conferencia mañanera de este viernes en Palacio Nacional, López Obrador refirió que es partidario «de que se vea hacia adelante».
«Estamos hablando de 1986 a finales del 18; 36 años de saqueo. Aun así, yo considero que no debemos convertirlos en víctimas porque es el colmo, después de todo lo que hicieron, que no aceptan, que no reconocen, que no actúan con autocrítica, con humildad, de todo el daño que causaron ¡Imagínense que pasen a sentirse perseguidos!», expresó López Obrador.
«No es mi fuerte la venganza y ningún expresidente de México va a ser perseguido por cuestiones políticas, no necesitamos de eso», añadió.
Mencionó que para ganar legitimidad, el expresidente Carlos Salinas de Gortari metió a la cárcel a Joaquín Hernández Galicia «La Quina», quien fuera líder petrolero.
Agregó que el sexenio de Salinas fue el de mayor corrupción y en el que se profundizó más la desigualdad económica y social.
Declaró también que desde que llegaron los españoles en la Conquista, empezó el saqueo con el tesoro de Moctezuma, «que se lo repartieron y le tocó más a los jefes de la invasión».