
Por Rocío de Jesús
Integrantes del colectivo Sororidad Monclova, manifestaron estar dispuestas a seguir debatiendo el tema del aborto y exhortan a que otros actores se sumen, pues consideran que muchos se han mantenido al margen. En cuanto al Padre Lázaro, señalaron que no es su petición que lo remuevan de su parroquia.
En voz de Aurora Bustos Arellano, integrante del colectivo feminista, la agrupación está preparada para continuar con la discusión acerca del tema.
Enfatizó que lo ideal es que no esté solo un representante de Provida y uno de feministas, sino que se involucren más actores como la parte médica, sicológica, así como también instituciones del estado como el Centro de Empoderamiento y Jurisdicción Sanitaria.
Respecto al CEJM, indicó que se han mantenido muy al margen de la discusión, pues no han emitido una sola declaración a este respecto, por lo que les gustaría que participaran más activamente.
“El propósito no es tratar de convencer a la gente que tiene una postura sino informar a la población lo que está pasando y es importante que participen otros para despejar dudas a la población en general”.
Respecto al Padre Lázaro, reiteró que las formas no fueron las apropiadas, así como tampoco el espacio desde el que se emitió el controvertido mensaje que ha puesto en la mira nacional al sacerdote, sin embargo esto –indicó- debe servir para que se hable más del tema.
“Pero desde una posición de no estigmatizar y de no violentar y de no tomar podios para decir cosas irresponsablemente”.
En cuanto a una remoción u otro tipo de consecuencia para el religioso, Bustos Arellano recalcó que no es su interés.
“Nosotros solamente señalamos que las declaraciones fueron alarmantes y como sociedad tenemos que poner atención a ello, pero no deseamos otro tipo de ajusticiamiento, no es nuestra posición, no es nuestro tipo de trabajo y creo que ni siquiera es lo conveniente, más bien los que podrían opinar, es la gente de su propia comunidad”.