
El Instituto Nacional de Migración (INM) comparó la actitud de los líderes de la caravana migrante que salió de Tapachula, Chiapas, el pasado 23 de octubre, con la de los “polleros”.
En un pronunciamiento, el órgano de la Secretaría de Gobernación afirmó que sus acciones y declaraciones también son irresponsables e incorrectas.
No obstante, a menos de una semana de la agresión armada de guardias nacionales en Pijijiapan, Chiapas, aseguró que las autoridades han respetado los derechos humanos de los migrantes.
Acusó directamente al líder de la organización Pueblos Unidos Migrantes, Irineo Mujica Arzate, y al coordinador del Centro de Dignificación Humana A. C., Luis Rey García Villagrán.
“La actitud y falta de colaboración de los líderes parece más cercana a la de los traficantes de personas o ‘polleros’ que ponen en riesgo la integridad y vida de la población migrante”, sostuvo.
“El INM considera imprecisas, irresponsables e incorrectas las acciones, así como las declaraciones de los autodenominados líderes de la caravana de personas migrantes”.
Para el Instituto, los líderes mienten al afirmar que el objetivo de la caravana es regularizar a las personas migrantes, o de lo contrario ya hubieran aceptado la propuesta del INM.
“Aseguran que las personas migrantes se negaron a ser regularizadas, cuando en los hechos no permiten la interlocución con ellas y las mantienen como si fueran rehenes”, aseguró.
“De 2019 a la fecha, el instituto ha realizado poco más de 606 mil trámites para regularizar la estancia de las personas migrantes, lo que favorece su integración a la sociedad”.
También acusó a los líderes de impedir que las personas que integran la caminata y presentan síntomas de distintas enfermedades, puedan ser diagnosticadas o atendidas de manera adecuada.
Sostuvo que las decisiones de los líderes no sólo afectan de manera directa a la población migrante, sino hacen que permee un ambiente de animadversión hacia la autoridad.
“El INM lamenta que los líderes obstruyan y descalifiquen las propuestas para regularizar a las personas. Se dicen engañados por el INM cuando éste ha sido transparente en sus ofrecimientos”, añadió.
Pero presume trato digno a migrantes
En medio de críticas al Gobierno federal por los operativos para detener a migrantes, el INM aseveró que ha salvaguardado la integridad física de los integrantes de la caravana.
Rechazó que exista “represión”, reiteró que se han respetado sus derechos humanos y consideró que los migrantes no son víctimas de la autoridad, sino de los líderes.
“Aseguran que el INM ha desatado una violencia física y psicológica e impulsa una campaña de xenofobia en contra del contingente de personas migrantes, cuando la autoridad ha cumplido con su responsabilidad al salvaguardar la integridad física de sus integrantes, al ofrecer regularizarlos, trasladarlos a albergues de puertas abiertas y proporcionarles documentos que acrediten su estancia regular”, aseguró.
“Se victimizan al acusar represión por parte de la autoridad, cuando en realidad las víctimas de ellos son las personas migrantes que integran la caravana. Mienten al acusar que el INM ha reprimido a quienes conforman la caravana, cuando los Grupos Beta los acompañan y auxilian”.
El INM destacó que ha pedido la presencia de observadores de las comisiones nacional y estatal de los Derechos Humanos, para vigilan la caravana.
“Han falseado la información al señalar que el INM desea rescatarlos y devolverlos a su país; la propuesta es totalmente opuesta a esta afirmación”, expuso.
“Su objetivo no es la regularización de las personas migrantes para permanecer en México, sino su interés personal, engañando, manipulando y usurpando la voluntad de esta población”.