Poco más de 2.5 millones de pesos es lo que los clubes de la Liga MX tendrán que desembolsar para «limpiar» a sus jugadores de las tarjetas amarillas y reiniciar el conteo para la Fase Final del Apertura 2021, así como para el inicio del Clausura 2022.
Cruz Azul es el club más indisciplinado y pagará 177 mil 408 pesos por las 44 amarillas que los celestes acumularon; incluso, Pablo Aguilar vio la quinta amarilla en esta Jornada 17 y se perderá el Repechaje ante Rayados.
Le sigue Toluca con un monto de 173 mil 376 pesos por los 43 cartones preventivos. De hecho, los cinco equipos que más deben pagar son la Máquina, los Diablos, Guadalajara (161 mil 208), Mazatlán (161 mil 208) y Querétaro (153 mil 216).
Con apenas 27 amarillas, Necaxa es la institución mejor portada y solo hará un pago de 108 mil 864 pesos. La cantidad total que la Liga MX recibirá al finalizar esta Fase Regular es de 2 millones 511 mil 936 pesos, de acuerdo al Reglamento de Sanciones 2020-2021 de la Federación Mexicana de Futbol en su artículo 16.
El sistema de pagos, estipulado en el Reglamento de Competencia de la Liga MX
«Al término de la Fase de Calificación, y con el fin de que los Jugadores de los Clubes que disputen la Fase Final del Torneo inicien sin amonestaciones, éstas serán canceladas a través del pago de una nueva aportación extraordinaria de 45 UMAS por cada tarjeta amarilla que tenga el Jugador, cuyo concepto será la cancelación de las mismas”, señala el Reglamento.
También señala que en la Fase Final, los planteles acumulan las amarillas y una vez concluida la campaña se vuelve a hacer el cobro.
“Las amonestaciones aplicadas a los Jugadores que participen en la Fase Final también serán acumulativas y se sancionarán de conformidad con lo dispuesto por el presente artículo”.
De igual manera, aquellos futbolistas que sumaron cinco amonestaciones, además del partido de suspensión que reciben por castigo, deben hacer el pago de 5 mil 400 pesos como multa.
¿Quién paga las multas? ¿El club o el jugador?
Hay clubes, como Tigres, que multan de manera interna a sus futbolistas por las tarjetas amarillas como en su momento lo reveló Jürgen Damm, quien especificó que si la amonestación era por una jugada futbolera o para beneficio del equipo para cortar el avance del rival el club se hace responsable de la multa y en estos casos el jugador no tendría que pagar por dicha tarjeta.
Eso sí, si la amonestación por parte del árbitro hacia el jugador fue por un reclamo o se comprueba que fue una acción imprudente del jugador, en este caso a Damm se le descontaba la cantidad de 30 mil pesos de su nómina.