
Fabiola Sánchez
Mientas las autoridades celebran la detención de un presunto responsable del delito de robo de minisplits en el pasaje Hidalgo, los comerciantes tienen la certeza que se equivocaron de persona, ya que el detenido es el velador del lugar quien por casi un año ha cuidado este inmueble.
El pasado miércoles, Juan José Medrano, fue detenido por portación de arma blanca, motivo por el cual fue consignado ante el Ministerio Publico, señalando las autoridades se trataba además de uno de los involucrados en los robos registrados en los comercios de este pasaje.
Sin embargo, mismos comerciantes testigos de su detención, aseguraron que, al momento de haber sido asegurado, Juan José se encontraba realizando su labor de vigilancia una vez que los negocios ya habían cerrado las cortinas metálicas, cuando llegaron los preventivos y lo sacaron de la vista de una comerciante quien a última hora se quedó en su local.
La señora Delia Siller, comentó que los elementos de la policía preventiva llegaron hasta el pasaje comercial cuando ya estaban a punto de cerrar las cortinas del lugar y preguntaron por el velador, a quien invitaron a salir y dialogar en la vía pública.
“Aquí llegaron y preguntaron por Juan José, él estaba checando los locales que estuvieran cerrado y esperando a que yo saliera para cerrar la cortina principal, los mismos policías los invitaron a salir y se me hizo mucho que no regresara, cuando salí y pregunte por el me dijeron que ya se lo habían llevado detenido”.
Comentó la comerciante, que ella se encargó de buscar de inmediato alguien quien supliera el puesto de velador de Juan José y posteriormente se trasladó hasta seguridad pública para cuestionar el motivo de la detención, donde se le comunicó que por portación de arma blanca.
Por su parte Héctor Maldonado, encargado del Centro Comercial Hidalgo, detalló que tiene ya más de cinco años conociendo a Juan José y siempre ha sido un hombre honesto y trabajador, de quien no sospechan sea él el responsable del robo.
Ante esta detención, creció más el temor entre los comerciantes, ya que tienen la certeza que fue un error el que cometieron y que el ladrón sigue libre.